Daniel Redon­do ha sido nom­bra­do Pre­si­den­te de MGC Mutua, suce­dien­do al Dr. Bar­to­meu Vicens, que osten­tó este car­go duran­te la últi­ma déca­da, pero segui­rá vin­cu­la­do a la enti­dad como Pre­si­den­te Hono­rí­fi­co.

Redon­do se incor­po­ró a MGC Mutua en 1991, desem­pe­ñan­do sus fun­cio­nes como sub­di­rec­tor gene­ral y más tar­de como direc­tor gene­ral adjun­to. Pos­te­rior­men­te fue nom­bra­do direc­tor gene­ral, duran­te 10 años, y ha ocu­pa­do la vice­pre­si­den­cia del Con­se­jo de Admi­nis­tra­ción, duran­te el últi­mo año. Daniel Redon­do se ha dis­tin­gui­do por su lide­raz­go y capa­ci­dad de tra­ba­jo.

Como nue­vo Pre­si­den­te de MGC Mutua, apor­ta­rá su expe­rien­cia y visión estra­té­gi­ca para per­se­ve­rar el cre­ci­mien­to sos­te­ni­ble de la ase­gu­ra­do­ra y la efi­caz digi­ta­li­za­ción y pro­ce­sos de IA impul­sa­dos por la direc­ción gene­ral. Asi­mis­mo, se va a cen­trar en la expan­sión que está lle­van­do a cabo la com­pa­ñía en el terri­to­rio nacio­nal.

Daniel Redon­do es abo­ga­do, con con­tras­ta­da sol­ven­cia en el ámbi­to mer­can­til y ase­gu­ra­dor, Más­ter en Com­plian­ce por el ICAB (I.lustre Col.legi de l’Advocacia de Bar­ce­lo­na), miem­bro de la AEDAF (Aso­cia­ción Espa­ño­la de Ase­so­res Fis­ca­les) y MBA por ESA­DE.

Otro nue­vo car­go en la ase­gu­ra­do­ra, ha sido el de Lluís Mori­llas, miem­bro del Con­se­jo, desig­na­do Vice­pre­si­den­te de MGC Mutua. Mori­llas es un reco­no­ci­do empre­sa­rio y crea­ti­vo, fun­da­dor de una de las con­sul­to­ras de bran­ding de mayor pres­ti­gio y reco­no­ci­mien­to mun­dial. Des­de su nue­va posi­ción apor­ta­rá sus cono­ci­mien­tos en la ges­tión y la bue­na ima­gen de mar­ca de la ase­gu­ra­do­ra, así como otras fun­cio­nes implí­ci­tas en la cali­dad del ser­vi­cio y la expe­rien­cia de mutua­lis­ta.

Des­de sus nue­vas res­pon­sa­bi­li­da­des, Redon­do y Mori­llas con­ti­nua­rán pro­mo­vien­do los prin­ci­pios de MGC Mutua y su dis­po­si­ción para adap­tar­se a las nece­si­da­des de cada ase­gu­ra­do. La visión de ambos es actua­li­zar y moder­ni­zar el mutua­lis­mo, basán­do­se en sus valo­res y su auten­ti­ci­dad.