¿Cuándo es que necesitas una auditoría SEO? Si no sabes por qué tu web no gana posiciones, incluso si estás haciendo todo lo posible para que esta vaya ganando visibilidad en buscadores, esa es la señal. Pero ¿qué es una auditoría SEO y para qué sirve?
Para responder a esta pregunta contamos con GMEDIA, una agencia SEO afincada en Barcelona con casi 20 años de trayectoria en el sector. Una agencia de marketing digital que sabe mucho de posicionamiento en buscadores.
- ¿Qué es una auditoría SEO?
Una auditoría SEO es el análisis específico de cada uno de los detalles que influyen en el posicionamiento orgánico de una web. Según afirma el equipo de GMEDIA, la finalidad de esta auditoría es localizar los problemas y analizar los puntos de optimización a trabajar para mejorar en el ranking del dominio en las páginas de resultados.
Es así que, dentro de esta auditoría SEO, se estudiará de manera exhaustiva todos los elementos de carácter interno como externo de la web, con la finalidad de poder delimitar las acciones necesarias para continuar mejorando. Desde GMEDIA afirman que la auditoría SEO es el primer escalón de la optimización SEO, un primer paso ineludible en toda estrategia SEO.
Al crear un sitio web, este se va nutriendo continuamente de nuevo contenido y nuevas configuraciones. En este proceso, resulta sencillo controlar el comportamiento de todas las actividades una vez ejecutadas. Si a ello le sumamos las constantes modificaciones en el algoritmo de Google y las conductas de los usuarios en evolución, es pertinente evaluar periódicamente el estado de un sitio web.
En este sentido, partir de una auditoría SEO permite adaptarse con mayor flexibilidad a los cambios de algoritmo en los buscadores, atraer más tráfico orgánico y optimizar el posicionamiento y la indexación de la página. Todo ello, desde una perspectiva estratégica y procurando mantener la salud general del sitio.
- Auditoría SEO paso a paso
A pesar de que se trata de un estudio en el que se tienen en cuenta más de 200 factores, GMEDIA resume en 5 grandes puntos las fases de una auditoría SEO. Estos puntos son rastreo e indexación; rendimiento y usabilidad; contenido; visibilidad en buscadores y estudio de la competencia.
- Rastreo e indexación
En primer lugar, se debe conocer el estado actual del sitio web. Para ello se recurre a un rastreo del mismo y algunas de las herramientas más comunes con tal de llevarlo a cabo son Screaming Frog o Site Audit de Semrush. Con ellas se pueden detectar problemas que imposibiliten el rastreo del sitio web de la mano de los «robots» de Google.
La revisión es también fundamental: si una página no consta como indexada, esta no aparece en los resultados de búsqueda. Aunque no es necesario que todas las páginas de la web estén indexadas, se debe comprobar que aquellas que albergan contenido de valor para el usuario sí lo estén. Google Search Console es el método más habitual para su revisión.
Para analizar el tráfico que obtiene la web y determinar cuáles son las fuentes más relevantes se emplea Google Analytics. Entre todo, el tráfico orgánico cobra un protagonismo singular.
- Rendimiento y usabilidad
Es el punto de la auditoría SEO en que se revisa la arquitectura web, la velocidad de carga, su usabilidad y los demás aspectos técnicos de carácter SEO. Estos factores son puntos muy valorados por Google, ya que ofrecen una mejor experiencia de usuario.
Además, se revisa la arquitectura de la web con la finalidad de que esta sea amigable y que todo visitante pueda acceder a cualquier información con 3 clics, aproximadamente. Y para completar esta etapa de la auditoría SEO, se analizan todos los enlaces rotos, su usabilidad móvil y aquellos aspectos técnicos del SEO.
- Contenido
«El contenido es el rey». Teniendo esto en cuenta, es tarea obligada revisar todo el contenido. De ahí se sabrá qué funciona y qué no, pudiendo tomar decisiones a partir de ello. Google Analytics es de nuevo el mejor aliado para este fin.
Los títulos, las metadescripciones, los enlaces internos, las URLs y las imágenes no deben pasarse por alto en el chequeo del contenido. SEO On Page será imprescindible para ello, contemplando asimismo que no exista contenido duplicado ni canibalización entre las palabras clave.
- Análisis externo
Una vez estén realizados los puntos anteriores, llega el momento del análisis SEO externo, con el que se analizarán todos los backlinks. Se trata de revisar su calidad y si son dofollow o nofollow.
En este punto, la agencia SEO GMEDIA destaca que son necesarias herramientas de pago como Semrush, Ahrefs o Majestic. Con ellas, se analiza la calidad de los enlaces entrantes y la autoridad de los dominios que están enlazado la web.
- Visibilidad en buscadores y estudio de la competencia
Finalmente, se analiza el posicionamiento SEO de la página web, teniendo en cuenta todas las palabras claves por las que se está posicionando. El fin de una estrategia SEO bien estructurada es alcanzar visibilidad en los motores de búsqueda y situarse en las primeras posiciones. Así pues, es importante conocer el punto de partida. De lo contrario, no se puede monitorizar la evolución conforme se van implementando las mejoras a nivel SEO.
No olvidemos a la competencia: ¿qué palabras clave están posicionando? ¿Cómo las están posicionando? ¿Qué contenidos comparten? ¿Qué enlaces contienen y cuál es su calidad? Conocer la respuesta a estas preguntas es sustancial para encontrar nuevas oportunidades en el posicionamiento.
A partir de estos ítems se pretende conseguir unos buenos resultados a medio y largo plazo. A su vez, gracias a una auditoría SEO correctamente instaurada, se logrará un mayor alcance que se traducirá en conversiones.