El sector turístico español ha vivido una Semana Santa de notable éxito, con un incremento del 24,4% en las reservas hoteleras en comparación con el mismo periodo de 2024. Este crecimiento se explica por el papel cada vez más protagónico de la Inteligencia Artificial (IA) en la transformación de la industria. Un reciente análisis de The Valley Business and Tech School, institución experta en negocio y tecnología, revela cómo la IA está redefiniendo las preferencias de los viajeros y optimizando la operativa del sector turístico en España.
El análisis de The Valley Business and Tech School indica que una parte importante de la demanda turística actual se inclina hacia propuestas que destacan por su avanzado nivel de digitalización, su compromiso con la sostenibilidad y su capacidad para adaptarse a las necesidades específicas de cada perfil de viajero. Además, la inteligencia artificial y el big data están demostrando ser herramientas muy eficientes para predecir la demanda con mayor precisión, ajustar los precios de manera dinámica en tiempo real e incluso optimizar el flujo de turistas en los destinos, evitando la saturación en puntos de alta concentración.
Juan Luis Moreno, Partner & Managing Director de The Valley Business & Tech School, comenta sobre la importancia de la tecnología para enriquecer la experiencia turística: “En un sector tan sensible a las expectativas como el turismo, la tecnología no debe limitarse a hacer más eficientes los procesos: tiene que enriquecer la experiencia. La clave está en utilizar herramientas digitales para anticiparse a las necesidades del viajero, ofreciendo soluciones personalizadas y en tiempo real que superen sus expectativas. Quien sepa combinar automatización con enfoque humano tendrá una ventaja competitiva decisiva en el mercado actual”.
Los expertos de esta escuela de negocios y tecnología han identificado cinco tecnologías principales que están modificando el panorama del turismo en España, impulsando su transformación y generando nuevas oportunidades de negocio:
- Inteligencia artificial para la personalización de la experiencia. La IA permite analizar grandes volúmenes de datos sobre las preferencias de los turistas, su historial de viajes y su comportamiento de compra para ofrecer recomendaciones personalizadas de alojamiento, actividades y rutas. Esta tecnología ya está integrada en diversas plataformas de reservas y asistentes virtuales que anticipan las necesidades de los viajeros. El análisis cita ejemplos de destinos que utilizan la IA para proponer itinerarios automáticos basados en el perfil del turista, las condiciones meteorológicas y la disponibilidad de aforos en diferentes atracciones.
- Análisis predictivo para la gestión de la demanda. El uso de modelos predictivos, alimentados por datos en tiempo real, facilita la anticipación de los flujos turísticos y permite a los diferentes actores del sector adaptar su oferta, desde la logística hotelera hasta la movilidad urbana. Esta información es esencial para evitar cuellos de botella en destinos muy concurridos y para distribuir de manera más eficiente a los visitantes. En ciudades con un rico patrimonio histórico, esta tecnología se está aplicando para redirigir el tránsito turístico hacia zonas menos saturadas, mejorando así la experiencia del visitante y reduciendo el impacto en las áreas más populares.
Realidad aumentada y gamificación para enriquecer el destino. Ayuntamientos y empresas del sector turístico están utilizando la realidad aumentada para superponer información histórica o cultural directamente sobre los espacios reales, accesible a través de dispositivos móviles. Esta tecnología mejora ostensiblemente la accesibilidad al contenido y permite a los turistas descubrir los lugares con una narrativa diferente y más interactiva. En ciudades con una alta concentración de patrimonio, estas soluciones están reemplazando a las audioguías tradicionales, aportando dinamismo e interacción a la visita.
- Automatización para una experiencia más fluida. El check-in automatizado en hoteles, los sistemas de reconocimiento facial en aeropuertos y las cerraduras digitales en los alojamientos son ejemplos de aplicaciones de la automatización que están mejorando la fluidez de la experiencia del viaje. Estas herramientas no solo reducen los tiempos de espera para los turistas, sino que también mejoran la seguridad y permiten liberar recursos humanos para tareas de mayor valor añadido. En espacios como estaciones de transporte o museos, los flujos de visitantes se gestionan de manera más eficiente gracias a sensores y sistemas inteligentes que analizan el comportamiento en tiempo real.
- Sostenibilidad tecnológica como nuevo criterio de elección. Un número creciente de turistas valora positivamente si el destino o el alojamiento emplean energías renovables, sistemas de ahorro de recursos o tecnologías que minimicen su huella ambiental. La transparencia en estos datos y el uso de blockchain para verificar las prácticas sostenibles están ganando simpatías en las decisiones de viaje. El análisis de The Valley Business School cita el último Eurobarómetro sobre turismo y medioambiente, donde más del 60% de los viajeros europeos afirman que eligen sus destinos en función del impacto ambiental de su viaje.