La Asociación DEC, en colaboración con Avanade Spain y con la elaboración de Vecdis, ha presentado su primer Anuario de Tendencias en Human Experience. Este documento recoge las diez tendencias más sobresalientes que marcarán el futuro de la experiencia de cliente y empleado, apostando por interacciones excepcionales y sostenibles.
Tras un año trabajando en su propio Observatorio de Tendencias, DEC ha editado su primer Anuario de Tendencias, una herramienta que permitirá a nuestros asociados entender mejor el entorno, extraer conclusiones útiles y trabajar con mayor certeza, explicó Nacho Torre, Vocal y líder de la comisión de innovación y tendencias en la Asociación DEC, además de Director de Estrategia, Transformación y Dato, y Director General en Ibercaja.
El documento organiza sus diez tendencias en tres bloques fundamentales: cliente, empresa y empleado. Cada uno de estos bloques presenta desafíos específicos que deben abordarse para construir una experiencia de cliente y empleado competitiva y alineada con las demandas del futuro, señaló Lluis Quetglas, CEO de Vecdis.
Cliente: nuevas demandas y personalización
Las expectativas de los consumidores están en constante evolución, haciendo imprescindible la personalización y la integración omnicanal. Las tendencias más destacadas en este ámbito incluyen:
Tailor-Made Interactions (Personalización omnipresente): La personalización 360º es clave para fortalecer la relación con los clientes, adaptando cada interacción a sus preferencias individuales. Este nivel de personalización no solo aumenta la satisfacción y fidelidad, sino que también permite anticipar y satisfacer sus necesidades de manera casi quirúrgica
Seamless Channel Integration (Omnicanalidad integral): Garantiza una experiencia fluida entre canales digitales y físicos, fortaleciendo la identidad de marca y la fidelización. Si bien se habla de tendencia, la omnicanalidad integral ha pasado a ser una necesidad estratégica.
Green CX (Sostenibilidad como diferenciador clave): Integrar prácticas sostenibles en la estrategia de experiencia de cliente es ahora un factor competitivo crucial. En esta tendencia se evalúa cómo equilibrar sostenibilidad, rentabilidad y autenticidad, evitando el greenwashing y fortaleciendo la confianza.
Trust Architecture (Transparencia como experiencia): La privacidad y la seguridad de los datos se convierten en pilares estratégicos para generar confianza y lealtad. Las marcas que brindan a los usuarios un mayor control sobre sus datos pueden reducir la rotación de clientes en un 40% y aumentar el valor de vida del cliente (CLV) en un 25%.
Empresa: tecnología, ética y propósito
Las compañías buscan operar con agilidad, optimizar cada interacción y garantizar seguridad, todo mientras construyen relaciones de confianza. En este bloque se destacan tendencias como:
Customer Agility (Economía de la impaciencia): Responder con rapidez sin sacrificar calidad es un factor decisivo en la competitividad. En este aspecto, Ramón Miranda, Technology Innovation Officer for Europe en Avanade Spain comenta que hay que tratar de actuar de forma inmediata para satisfacer a los clientes; de hecho, el 85% de las empresas cree que no adoptar IA rápidamente les va a hacer perder ventaja competitiva.
Responsible AI (Ética en la inteligencia artificial): Garantizar transparencia y evitar sesgos es un desafío clave para las organizaciones. Es necesario innovar éticamente, asegurando que la tecnología potencie la interacción humana sin sustituirla.
Emotional Computing (Computación afectiva): Integrar tecnología capaz de interpretar emociones humanas sin perder autenticidad.
Purpose-Driven Strategy (Estrategia impulsada por el propósito): Alinear valores genuinos con decisiones estratégicas para fomentar la conexión emocional con los clientes. La empresa con un propósito claro y auténtico crea conexiones emocionales profundas con los clientes, pues además de querer ser atendidos, quieren ser entendidos. Además, obtienen beneficios desde cuatro puntos de vista: lealtad, diferenciación, reputación y rendimiento financiero,
Empleado: motor del cambio
Los empleados son el eje de la transformación empresarial, y su bienestar y capacitación son fundamentales para la evolución del mercado. En este sentido, el anuario destaca:
Adaptive Workforce Evolution (Empleados como motor del cambio): La formación y el desarrollo de habilidades son clave para la competitividad.
Building Digital Trust (Superar el tecnoestrés): En esta tendencia se analizan iniciativas de bienestar, capacitación y gestión del cambio para reducir el tecnoestrés de los colaboradores, asegurando la productividad y fomentando entornos laborales resilientes, que garanticen la estabilidad interna.