Es preocupante la frecuencia con que en los bares y las discotecas, cuando la luz es difusa, los hombres se sobrepasan con las mujeres, a las que toquetean más allá de lo aceptable. Para poner de relieve este problema, Schweppes ha creado en Brasil un vestido que, sensible al tacto, pone cifras contantes y sonantes al acoso del que son víctimas muchas mujeres cuando salen por la noche.
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El vestido, equipado con múltiples sensores en toda su superficie, fue puesto en manos de tres mujeres distintas (Luisa, Tatiana y Juliana) que se ofrecieron a usarlo voluntariamente para comprobar cuántas veces fueron tocadas sin su consentimiento por miembros del sexo opuesto a lo largo de toda una noche.
Los sensores del vestido siguieron en tiempo real los comportamientos a todas luces pasados de tono a los que fueron sometidas sus portadoras, y dictaminaron que las tres féminas que lo llevaron puesto fueron tocadas 157 veces en un espacio de 3 horas y 47 minutos. Es decir, las mujeres que tomaron parte en el experimento de Schweppes fueron manoseadas una media de 40 veces por hora.
Con The Dress for Respect (así se llama el vestido de Schweppes) la célebre marca de bebidas carbonatadas pretende animar a los hombres a repensar sus comportamientos y a aproximarse a las mujeres con más respeto. La campaña The Dress for Respect lleva la firma de la agencia Ogilvy Brasil.