El Inter­net está cam­bian­do y la for­ma en que se ven­den pro­duc­tos y ser­vi­cios tam­bién. Has­ta hace menos de una déca­da, al acce­der a un sitio web que con­te­nía publi­ci­dad nos encon­trá­ba­mos con múl­ti­ples anun­cios que posi­ble­men­te no eran de nues­tro inte­rés, y que ade­más toca­ban temas muy leja­nos a lo que fre­cuen­ta­mos en nues­tras bús­que­das de Goo­gle.

Hoy día el con­tex­to está cam­bian­do. Hay mucho dine­ro ron­dan­do entre las empre­sas que pagan publi­ci­dad y las que ofre­cen dicho ser­vi­cio, por lo que es nece­sa­rio estruc­tu­rar la publi­ci­dad de for­ma que pagues estric­ta­men­te por publi­ci­tar­te a un gru­po de per­so­nas con intere­ses espe­cí­fi­cos y afi­nes.

Por ejem­plo, si eres una empre­sa que comer­cia­li­za smartpho­nes, lo ideal es que te vean per­so­nas que bus­quen smartpho­nes, o al menos tec­no­lo­gía en gene­ral. Otro ejem­plo podría ser las lla­ma­das ‘coo­kies’ que acep­tas al ingre­sar a una web: al acep­tar­las, acep­tas algu­nos pará­me­tros de nave­ga­ción que pue­den modi­fi­car estas prác­ti­cas de publi­ci­dad.

Esto se lla­ma publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca, una for­ma de lle­gar a clien­tes poten­cia­les más direc­ta­men­te.

¿Qué es la publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca?

La publi­ci­dad o com­pra pro­gra­má­ti­ca es el méto­do en que las empre­sas com­pran ‘per­so­nas’ en vez de espa­cios publi­ci­ta­rios. El pro­ce­so de publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca se rea­li­za de for­ma onli­ne y en tiem­po real a tra­vés de diver­sos algo­rit­mos, y se auto­de­fi­ne como ‘pro­gra­má­ti­ca’ por­que se adquie­ren los espa­cios publi­ci­ta­rios sin que exis­ta inter­ven­ción huma­na.

Sin embar­go, exis­te una for­ma de ver­lo más fácil: la publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca es la for­ma en que pue­des hacer publi­ci­dad onli­ne lle­gan­do más direc­ta­men­te a tu públi­co obje­ti­vo, igno­ran­do esas per­so­nas que no están intere­sa­das en tu nego­cio (tec­no­lo­gía, moda, turis­mo, etc.).

La prin­ci­pal ven­ta­ja de la publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca es que lue­go de que el usua­rio encuen­tra el anun­cio, es posi­ble hacer una cone­xión entre el mis­mo y la mar­ca, con una pro­ba­bi­li­dad más alta de hacer clic y que ese usua­rio pue­da com­prar el pro­duc­to o ser­vi­cio, ya que el anun­cio está refi­na­do según sus intere­ses.

¿Cómo fun­cio­na?

La publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca uti­li­za algo­rit­mos varia­dos para hacer coin­ci­dir un clien­te poten­cial con una empre­sa que ofrez­ca un pro­duc­to o ser­vi­cio de inte­rés. ¿Te has fija­do que en Ins­ta­gram tu apar­ta­do de bús­que­da mues­tra mate­rial afín con tus gus­tos? Pues sí, Ins­ta­gram tie­ne un algo­rit­mo pare­ci­do que se basa en tus bús­que­das, likes y ami­gos para mejo­rar el con­te­ni­do que te ofre­ce.

La publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca valo­ra diver­sos aspec­tos del usua­rio para refi­nar los resul­ta­dos, como el hora­rio para nave­gar, los dis­po­si­ti­vos que uti­li­za, los gus­tos o los intere­ses. Entre otras varia­bles, se enfo­ca tam­bién en la edad, la ubi­ca­ción y el géne­ro para dar un resul­ta­do más cer­cano.

Ven­ta­jas de la publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca

• Opti­mi­zar el ren­di­mien­to: al refi­nar los clien­tes poten­cia­les en per­so­nas que están intere­sa­das en el pro­duc­to o ser­vi­cio, el ren­di­mien­to aumen­ta con­si­de­ra­ble­men­te y hay más pro­ba­bi­li­dad de ven­der.
• Con­trol de esta­dís­ti­ca: Las cam­pa­ñas de publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca son medi­bles y modi­fi­ca­bless. Esto quie­re decir que pode­mos valo­rar las esta­dís­ti­cas para cono­cer qué anun­cios dan mejo­res o peo­res resul­ta­dos, y modi­fi­car en tiem­po real lo nece­sa­rio para incli­nar­nos a un pun­to de la cam­pa­ña que de mejo­res resul­ta­dos.
• Inter­na­cio­na­li­za­ción: La publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca es una téc­ni­ca glo­ba­li­za­da. Es decir, pue­des lan­zar tu cam­pa­ña en Espa­ña, pero si tu mer­ca­do está en Fran­cia, Ale­ma­nia o Ita­lia (por ejem­plo), tam­bién pue­des lle­gar a esos paí­ses con una con­fi­gu­ra­ción pre­via.

¿Qué es Real Time Bid­ding (RTB) y en qué influ­ye?

El Real Time Bid­ding es una for­ma de hacer publi­ci­dad pro­gra­má­ti­ca a tra­vés de apues­tas lle­va­das a cabo en tiem­po real. Este pro­ce­so ocu­rre en poco tiem­po, (unos 200 mili­se­gun­dos) y es posi­ble a tra­vés del uso de Big Data.

Pare­ce un con­cep­to com­pli­ca­do, pero no lo es. Segu­ra­men­te te has dado cuen­ta que en los últi­mos años, prác­ti­ca­men­te todos los sitios webs te mar­can un anun­cio en el que debes ‘acep­tar los coo­kies’ según Tér­mi­nos y Con­di­cio­nes.

Resul­ta que al entrar en cada web, los coo­kies reco­gen nues­tros datos de usua­rio y crean un per­fil visi­tan­te. En el pro­ce­so de Real Time Bid­ding los anun­cian­tes o empre­sas intere­sa­dos en tu per­fil (pro­ba­ble­men­te tec­no­lo­gía, si estás aquí), podrán pujar por un per­fil como el tuyo.

Con esto como anun­cian­te ase­gu­ras que tu inver­sión en publi­ci­dad irá diri­gi­da a per­so­nas intere­sa­das, siguien­do el ejem­plo, en el área de la tec­no­lo­gía. Es decir, es una for­ma de ase­gu­rar efi­cien­cia, ren­di­mien­to y efec­ti­vi­dad, aun­que con un pro­ce­so por supues­to más metó­di­co y que debe lle­var­se por pasos.