Promociones: esenciales para fidelizar al cliente

Promociones: esenciales para fidelizar al cliente

Pro­mo­ver la fide­li­za­ción de los clien­tes debe ser uno de los pila­res bási­cos den­tro de cual­quier estra­te­gia empre­sa­rial, no solo por su impor­tan­cia, ya que un clien­te satis­fe­cho nun­ca se irá con la com­pe­ten­cia, sino por­que es bien sabi­do que es 3,5 veces más fácil ven­der un pro­duc­to o ser­vi­cio a un clien­te ya exis­ten­te que a un clien­te nue­vo.

El obje­ti­vo de un buen pro­gra­ma de fide­li­za­ción siem­pre será que el con­su­mi­dor sien­ta agra­do y satis­fac­ción en todo momen­to con la mar­ca para que su deci­sión de com­pra nun­ca varíe. Pero ¿cómo lograr­lo? Una de las mejo­res for­mas son las pro­mo­cio­nes al con­su­mi­dor, ya que no solo sir­ven para poten­ciar la ven­ta de los pro­duc­tos, tam­bién pue­den resul­tar de gran uti­li­dad para que los clien­tes poten­cia­les pasen un buen rato y se entre­ten­gan con la mar­ca.

Hay muchos tipos de pro­mo­cio­nes al con­su­mi­dor y aun­que casi todas ellas tie­nen un com­po­nen­te lúdi­co y de entre­te­ni­mien­to, no todas son igual de efec­ti­vas para las mis­mas mar­cas, pro­duc­tos o tipos de clien­tes.

  • Cupo­nes de des­cuen­to. La for­ma de fide­li­za­ción más sen­ci­lla, pero tam­bién la más ver­sá­til. Sir­ven tan­to para pro­mo­cio­nar nue­vos pro­duc­tos, como cap­tar nue­vos clien­tes en perio­dos des­ta­ca­dos como la Navi­dad o reba­jas. Tam­bién son espe­cial­men­te úti­les si que­re­mos dar sali­da a pro­duc­tos que lle­van tiem­po en stock.
  • Gami­fi­ca­ción. El obje­ti­vo es atraer la aten­ción del clien­te y que recuer­de la mar­ca gra­cias a que ha dis­fru­ta­do de un momen­to agra­da­ble con la pro­mo­ción. Exis­ten muchos tipos de jue­gos para ello, como los del momen­to gana­dor: rule­tas de la for­tu­na, ras­ca y gana, o jue­gos de memo­ria, agi­li­dad visual o de par­ti­ci­pa­ción social.
  • Sor­teos. Un clá­si­co. Hacer sor­teos entre los clien­tes más fie­les es siem­pre una bue­na idea para estre­char lazos y gene­rar enga­ge­ment. Pero con los sor­teos tam­bién es posi­ble, por ejem­plo, dar a cono­cer un nue­vo pro­duc­to de la mar­ca o con­se­guir segui­do­res en las redes socia­les.
  • Cash­back. Con­sis­te en crear cam­pa­ñas pro­mo­cio­na­les don­de el com­pra­dor reci­be par­te de la can­ti­dad gas­ta­da en prue­bas gra­tui­tas de algún pro­duc­to que se esté pro­mo­cio­nan­do. Es una for­ma muy sen­ci­lla para que se cap­te la aten­ción de los con­su­mi­do­res y clien­tes y de mejo­rar la expe­rien­cia de com­pra y recuer­dos de mar­ca.
  • Tar­je­tas de pun­tos. Este es uno de los cami­nos más ade­cua­dos si tu obje­ti­vo es incre­men­tar las ven­tas de for­ma con­ti­nua­da. Con­sis­te en entre­gar tar­je­tas de pun­tos a los clien­tes más asi­duos para relle­nar­las cada vez que com­pren en el esta­ble­ci­mien­to. Al com­ple­tar los hue­cos en esa tar­je­ta, reci­bi­rá un rega­lo rela­cio­na­do con la mar­ca. De esta for­ma, el inte­rés que se gene­ra en cada com­pra irá cre­cien­do a lo lar­go del tiem­po.

Sin embar­go, es impor­tan­te acla­rar que de poco sir­ven estos ejem­plos de fide­li­za­ción si no se dis­po­ne de un buen pro­gra­ma para moni­to­ri­zar paso a paso los resul­ta­dos de las cam­pa­ñas y, así, poten­ciar tus pun­tos fuer­tes y mejo­rar lo que no fun­cio­ne.