Por Eva Llorca – Noergia
El marketing multinivel es una forma de venta directa en la que los distribuidores independientes venden sus productos, por lo general, en casa de sus clientes o por teléfono. En teoría, los distribuidores pueden ganar dinero no sólo con sus propias ventas, sino también de las ventas de las personas que “reclutan”.
Convertirse en distribuidor de MLM es sencillo y no requiere ningún conocimiento real sobre el sector de aquellos productos que se vayan a vender. Muchos se convierten inicialmente en distribuidores con la idea de obtener estos productos con un buen descuento, por contar con un sueldo complementario o, simplemente, por embarcarse en una aventura emprendedora.
Venta multinivel: ¿fanatismo o carisma?
El sistema de marketing multinivel se basa en la venta, por lo que no sólo debemos comprometernos con nuestro propio negocio, sino que debemos contar con armas eficaces para vender el producto y ser capaces de soportar la presión necesaria hasta construir una organización sólida y estable.
Conocer el producto y compartir sus beneficios con otras personas para ir engrosando nuestra lista de contactos es fundamental, pero, ¿hasta qué punto un distribuidor de un negocio multinivel vende con carisma o simplemente acoge las doctrinas de la empresa como si de una religión se tratase?
Muchos opinan que la forma en la que los asociados multinivel defienden las convicciones de la marca, el producto y sus intereses, puede ser comparado a una “evangelización”.
El negocio multinivel es toda una filosofía donde los distribuidores con más años en la empresa consideran que la “mejora personal” es el valor más importante del negocio, potenciando valores de tipo espiritual.
Según los expertos, aunque se aluda a creencias o fe, “sólo se hace en referencia al propio individuo”. Ningún distribuidor considera la religiosidad como un factor que pueda afectar al éxito del negocio, simplemente, para algunas personas les sirve como elemento motivador por sus propias creencias.
De hecho, una forma de conseguir nuevos distribuidores es el impacto emocional que producen los testimonios de aquellas personas motivadas dentro del negocio multinivel y que comparten sus historias de éxito con su red de contactos.
MLM y redes sociales: un binomio que funciona
Cada vez son más los distribuidores que han encontrado en las redes sociales una manera efectiva de difundir los productos de su empresa y, sobre todo, hacer nuevos contactos.
Se pueden realizar estrategias muy variadas. Los hay que, desde su blog personal, comentan aspectos diversos que intercalan con temas relacionados con su negocio multinivel; otros utilizan las redes sociales para hacer networking y crear relaciones de mutuo beneficio que permita ayudarles a posicionarse en el mercado. Para algunos, las redes sociales son la principal fuente de tráfico gratuito hacia el contenido relacionado con su negocio y, en este aspecto, Twitter suele ser la forma más frecuente de conectar por su carácter ágil en la difusión de información, mientras que Facebook, con actualizaciones menos frecuentes, permite mantener un buen grupo de seguidores o suscriptores a los que mantener siempre informados.
¿Se puede conseguir el éxito en el marketing multinivel?
Como ya hemos comentado antes, para muchos participantes en negocios multinivel, las recompensas personales y la gratificación en sí misma del individuo es la principal valoración del éxito, incluso por encima de la posible riqueza económica que se pudiese alcanzar.
Evidentemente, uno no invierte en un negocio sólo por “sentirse bien con uno mismo”, sino para progresar económicamente. En España, la media de tiempo que permanecen los distribuidores en el negocio es de nueve años, aunque curiosamente, la gran mayoría de ellos apenas vende y su actividad se limita a consumir el producto, realizar algún pedido puntual y acudir a reuniones.
En nuestro país no parece un negocio demasiado rentable a la vista de los resultados del estudio realizado en 2004 por la profesora María Dolores García Sánchez. Con un trabajo medio de siete horas semanales, se obtienen unos ingresos menores a mil doscientos euros al año. Algo menos de tres euros la hora.
Ahora bien, la entrada con fuerza de las redes sociales en los últimos años probablemente esté cambiando el panorama, ya que éstas son un entorno muy propicio para la venta de “persona a persona”. La reducida inversión (que oscila entre los 100 y 600 euros) y la versatilidad del perfil emprendedor (entre 35 y 50 años, con estudios medios un 46% y universitarios un 18%, según la Asociación de Venta Directa –ADV–) ha animado a muchos a embarcarse en el negocio multinivel.
En Estados Unidos o Japón ya es un sistema de ventas bien considerado y quién sabe si en España en poco tiempo, las personas emprendedoras, comprometidas y bien capacitadas para la venta, podrán ver en el MLM su solución a la crisis.
Eva Llorcawww.noergia.com
@evallorca