Según han declarado muchos medios norteamericanos, los vídeos en Facebook no son la mejor manera de obtener beneficios ya que al final de las sumas y restas, consiguen unos ingresos mínimos con los mid roll, que son los anuncios que se introducen entre los vídeos que se publican en la red social.
En promedio, un medio de comunicación puede obtener un CPM entre 15 céntimos de dólar y 75 céntimos. Estos beneficios no se corresponden con el número de reproducciones que tiene el vídeo.
Esto se debe a que los anuncios solo aparecen en Facebook cuando se han reproducido más de 20 segundos, y sucede que los usuarios de la red social no suelen detenerse tanto tiempo en una misma publicación. Y, si se da ese caso, la gran mayoría dejan de ver el vídeo cuando se les avisa de que va a comenzar un anuncio. De esta forma, la gran mayoría de los contenidos audiovisuales de la red social se quedan sin monetizar.
No obstante, la red social no se plantea programar anuncios preroll, es decir, aquella publicidad que se inserta antes de que se empiece a reproducir un vídeo. Facebook prefiere pagar a los medios el 55% de los ingresos generados por los anuncios.
Esta política es semejante a la que se ha establecido en Watch, la plataforma de vídeos de Facebook. En ella, la red social pretende que los medios hagan vídeos más largos y de más calidad que les permitan competir directamente con YouTube.
Actualmente, la plataforma de vídeo de Facebook tiene un tiempo medio de visualización de 23 segundos por contenido. Su tasa de retención es seis segundos más alta que la de otras plataformas como News Feed.
No obstante, Youtube sigue liderando este mercado. Según Vox.com su tasa de retención es de 4 minutos. Y la CNN ha afirmado que se llega a ver de media un 65% del total de un vídeo de esta plataforma.