Por Bego García Oliver – Noergia
A pesar de que el marketing en redes sociales o social media está ganando popularidad, no es la única técnica, ni mucho menos, a nivel de marketing online. De hecho, para que una marca consiga sus objetivos dentro del universo de Internet, necesita acciones más allá de estas plataformas, cada una con sus funcionalidades y capaces de convertirse en herramientas puestas al servicio de objetivos concretos.
Por ejemplo, de nada sirve disponer de buena presencia en redes sociales si no existe un buen posicionamiento. Si se trata de una empresa nueva, se está dificultando la recepción de nuevos clientes que no podrán encontrarla a través del buscador porque no aparece bien posicionada.
Una de las herramientas que mejores resultados aporta es el e‑mail marketing. Con la lucha permanente contra el spam, son muchos los que la han considerado inadecuada; sin embargo, usándola bien (o lo que es lo mismo, con los usuarios interesados), tiene un enorme potencial con grandes tasas de conversión. Cabe tener en cuenta que se le ofrece información comercial a un usuario interesado en ella, ¿por qué no puede funcionar si tiene dos de los elementos más importantes?
Así pues, los secretos para un e‑mail marketing de calidad son dos: una base de datos actualizada (que permita disponer de una lista con sólo usuarios interesados que eviten que los envíos sean spameados) y la creación de esta base de datos que permita conseguir adeptos.
Partiendo de ello, los siguientes consejos pueden ser útiles de cara a una campaña de e‑mail marketing:
- Visibilidad: No es sencillo ampliar la base de datos si los botones de suscripción no son visibles. Gracias a ello, quienes estén interesados encontrarán la opción con mayor facilidad, evitando así que muchos se escapen por no dedicar tiempo a buscarlos.
- Argumentos: Son decisivos a la hora de hacer uso del botón de suscripción. La razón por la que deben suscribirse debe ser clara y será fundamental para conseguir el éxito. Enterarse antes que nadie de las últimas ofertas o recibir consejos prácticos pueden ser algunas buenas razones.
- Transparencia: Para hacer e‑mail marketing de verdad, nada será tan importante como mantener la base de datos inmaculada. Las bajas deben procederse rápidamente y sin errores con el fin de evitar posibles conflictos y ofrecer una imagen profesional (sobre todo teniendo en cuenta las implicaciones legales que tienen), y las altas deben organizarse correctamente para empezar a formar parte de cualquier envío.
- Diversificar campañas: No todos los usuarios son iguales. El secreto de un buen e‑mail marketing es saber diferencia y personalizar a los usuarios. En primer lugar, los diferentes perfiles pueden recibir un envío diferente, pero además, también se pueden dividir los activos de los inactivos, por ejemplo, pudiendo así crear campañas que les animen a participar y les devuelvan a la lista de “usuarios provechosos”.
- Testeo: Como toda acción publicitaria, realizar un test de acciones permitirá mejorar los resultados, pudiendo conocer lo que funciona mejor y peor para cada perfil de usuario. Para ello, basta con realizar dos envíos distintos a un grupo representativo de un mismo grupo, pudiendo conseguir conclusiones válidas de qué es lo más adecuado. Es lo que se llama Test A/B.
www.noergia.com @BGarciaOliver