La auto­acep­ta­ción sue­le ser el mayor obs­tácu­lo a supe­rar en el difí­cil camino que reco­rren quie­nes están ads­cri­tos a la comu­ni­dad LGBT. Recon­ci­liar­se con­si­go mis­mos y con su pro­pia sexua­li­dad es un óbi­ce apa­ren­te­men­te insal­va­ble para muchos jóve­nes, por lo que ser­vi­cios como Switch­board, cuya línea tele­fó­ni­ca gra­tui­ta brin­da sopor­te a la comu­ni­dad LGBT en Rei­no Uni­do, se tor­nan par­ti­cu­lar­men­te nece­sa­rios.

El núcleo de la nue­va cam­pa­ña de Switch­board en un cor­to­me­tra­je de 10 minu­tos de dura­ción rubri­ca­do por Ran­kin Crea­ti­ve y el direc­tor y guio­nis­ta Jor­dan Ros­si en el que Amir, un atri­bu­la­do estu­dian­te, bre­ga con su pro­pia sexua­li­dad.

The Call es el títu­lo del cor­to­me­tra­je. Bucea en la ator­men­ta­da men­te de Amir y le sigue en su tor­tuo­so via­je con rum­bo al auto­des­cu­bri­mien­to y la auto­cep­ta­ción median­te una serie de lla­ma­das a la línea de ayu­da de Switch­board.

Adam Ali, cono­ci­do por sus pape­les en series como Water­loo Road y Little Ame­ri­ca, se mete en la piel de Amir y revis­te a su per­so­na­je de una más que nota­ble ansie­dad que muta en últi­mo tér­mino en feli­ci­dad en las últi­mas esce­nas.

«Conoz­co de pri­me­ra mano el impac­to que ONG como Switch­board pue­den tener en la gen­te joven más vul­ne­ra­ble. Quie­ro garan­ti­zar a todo el mun­do que esté con­si­de­ran­do hacer uso de la línea 0800 que no hay nada que temer. Con­tem­plar la lucha de Amir a tra­vés de sus mie­dos y ver­le ven­cer sus emo­cio­nes para bus­car con­se­jo en Switch­board pue­de ali­viar la ansie­dad de mucha gen­te joven aun antes de ani­mar­se a lla­mar a su línea de ayu­da. Pue­de no pare­cer­lo, pero des­car­gar­te a ti mis­mo del peso y la pre­sión de aque­llo por lo que estás pasan­do te ayu­da a bus­car ayu­da y sol­ven­tar más rápi­do los pro­ble­mas que te acu­cian»», ase­ve­ra Ali.

«Este cor­to­me­tra­je va mucho más allá de decir­le a la gen­te que tie­ne un núme­ro de telé­fono gra­tui­to a su dis­po­si­ción. Creo en el poder del entre­te­ni­mien­to como fuer­za moto­ra para cam­biar las per­cep­cio­nes de la gen­te y abor­dar temas socia­les al mar­gen de la publi­ci­dad tra­di­cio­nal. El obje­ti­vo es con­tex­tua­li­zar los pro­ble­mas que enfren­ta la comu­ni­dad LGBT, de mane­ra que todo el mun­do pue­da enten­der el men­sa­je», aña­de Jor­dan Ros­si, que ya ha cola­bo­ra­do pre­via­men­te en pro­duc­cio­nes enfo­ca­das a la comu­ni­dad LGBT, hace otra valio­sa apor­ta­ción al retra­to de la cul­tu­ra «queer».