3 de cada 4 profesionales del marketing B2B invierte en influencers

Para el mar­ke­ting B2B, la publi­ci­dad en redes socia­les es un com­po­nen­te esen­cial para la gene­ra­ción de leads y la cons­truc­ción de rela­cio­nes empre­sa­ria­les sóli­das. Pero, a medi­da que las pla­ta­for­mas socia­les evo­lu­cio­nan, es cru­cial que las empre­sas adap­ten sus estra­te­gias para maxi­mi­zar su impac­to. Por ello, el 75% de los pro­fe­sio­na­les del mar­ke­ting B2B están uti­li­zan­do el mar­ke­ting de influen­cers cor­po­ra­ti­vos como estra­te­gia, y el 93% de ellos pla­nea aumen­tar la acti­vi­dad con influen­cers.

Según un recien­te infor­me de Ogilvy, basa­do en entre­vis­tas a 550 direc­to­res de mar­ke­ting (CMOs) de 11 mer­ca­dos, de mar­cas como Lin­ke­dIn, Dell, EY, IBM y Sam­sung, la deno­mi­na­da influen­cia B2B ha alcan­za­do un pun­to de infle­xión glo­bal para con­ver­tir­se en una de las prio­ri­da­des del mar­ke­ting que más rápi­do está cre­cien­do.

Pero ¿a qué nos refe­ri­mos cuan­do habla­mos del mar­ke­ting de influen­cia con per­fi­les cor­po­ra­ti­vos? Es la prác­ti­ca de aso­ciar mar­cas con per­so­nas influ­yen­tes, figu­ras cla­ve del sec­tor o exper­tos en mate­rias con­cre­tas. El obje­ti­vo de esta cola­bo­ra­ción es crear con­te­ni­dos que ten­gan un impac­to bene­fi­cio­so en la per­cep­ción de la mar­ca y en las deci­sio­nes de com­pra de sus clien­tes. Mien­tras que el B2C se nutre más a menu­do de crea­do­res de ten­den­cias, el B2B requie­re de un cono­ci­mien­to real y creí­ble, fru­to de una expe­rien­cia demos­tra­da.

La encues­ta, por tan­to, demues­tra que los altos direc­ti­vos reco­no­cen el poten­cial del mar­ke­ting de influen­cia B2B con el obje­ti­vo de cons­truir mar­cas que trans­mi­tan cre­di­bi­li­dad y favo­rez­can el con­tac­to con clien­tes poten­cia­les. Casi la mitad (49%) cree que los influen­cers pue­den mejo­rar la cre­di­bi­li­dad y fia­bi­li­dad de sus mar­cas, mien­tras que el 40% ha sido tes­ti­go de una mejo­ra en la gene­ra­ción de leads y en los resul­ta­dos de ven­tas gra­cias a sus estra­te­gias de Influen­ce Mar­ke­ting.

Aho­ra bien, aún que­da poten­cial por explo­tar. Los resul­ta­dos de este aná­li­sis sugie­ren que las empre­sas no han apro­ve­cha­do ple­na­men­te el poder de la influen­cia post­ven­ta, a pesar de que el 47% reco­no­ce el poten­cial de los influen­cers B2B para con­se­guir un mayor impac­to en esa fase post­ven­ta cuan­do se uti­li­zan con efi­ca­cia, con­si­guien­do incen­ti­var la pres­crip­ción, refor­zar la con­fian­za en la mar­ca y, en últi­ma ins­tan­cia, con­se­guir que el clien­te vuel­va a com­prar.

Este es el pri­mer estu­dio que mues­tra cla­ra­men­te el poten­cial, aún sin explo­tar, que se pue­de obte­ner de los influen­cers B2B. Algu­nos CMOs que han par­ti­ci­pa­do en el estu­dio han com­par­ti­do ejem­plos del impac­to de los influen­cers en todo el cus­to­mer jour­ney (reco­rri­do del clien­te), lo que demues­tra que el mar­ke­ting de influen­cers es la herra­mien­ta más ver­sá­til para los CMOs B2B”, afir­man los exper­tos de Ogilvy.