El 14 de febre­ro, ade­más del Día de los Ena­mo­ra­dos, es una de las jor­na­das con mejo­res ven­tas del año en la que se exhi­be un derro­che de crea­ti­vi­dad que va mucho más allá del color rojo, los cora­zo­nes y los bom­bo­nes.

Sixt, la com­pa­ñía ale­ma­na de alqui­ler de coches, es una de las mar­cas que mejor ha enten­di­do lo que debe de ser la publi­ci­dad en el siglo XXI, y San Valen­tín es una fecha que apro­ve­cha muy bien.

A tra­vés de su cuen­ta de Twit­ter han publi­ca­do una sen­ci­lla ima­gen acom­pa­ña­das de dos fra­ses: “¡Ay! Si los coches habla­ran… ¡Qué nun­ca nos fal­te el amor!”. En la ima­gen apa­re­cen las manos de una pare­ja entre­la­za­das apo­ya­das con­tra un cris­tal de coche empa­ña­do jun­to al tex­to: “¡Feliz Día del AMOR­ti­gua­dor!”.

Un ejem­plo más de buen hacer en el cam­po del mar­ke­ting y la publi­ci­dad de una com­pa­ñía que ha con­se­gui­do posi­cio­nar­se como uno de los mayo­res pla­yers de su sec­tor.

El prin­ci­pal secre­to de su éxi­to publi­ci­ta­rio resi­de en ser cons­cien­tes de que no exis­te la publi­ci­dad sin crí­ti­cas, tal y como expli­ca­ba en su momen­to Flo­rian Wude, direc­tor de mar­ke­ting de Sixt.