Retener clientes a través del servicio posventa

Retener clientes a través del servicio posventa

posventaPue­de pare­cer en muchas oca­sio­nes que lo más com­pli­ca­do es hacer nue­vos clien­tes. Lo impor­tan­te es que nues­tra base de clien­tes crez­ca y para ello es fun­da­men­tal no sólo que lle­guen nue­vos, sino tam­bién man­te­ner a los que ya tene­mos. En este sen­ti­do un buen ser­vi­cio pos­ven­ta es la cla­ve para el éxi­to en la reten­ción de clien­tes.

Cui­dar a nues­tros clien­tes supo­ne no sólo que ellos van a estar con­ten­tos, sino que tam­bién se van a con­ver­tir en emba­ja­do­res de nues­tra empre­sa. No pode­mos pen­sar que nues­tro nego­cio con­clu­ye una vez que les hemos ven­di­do el pro­duc­to. Tene­mos que acom­pa­ñar­les y sobre todo ayu­dar­les a sacar el mejor par­ti­do de nues­tro pro­gra­ma.

Por otro lado, tam­bién tene­mos que hacer­nos res­pon­sa­bles de que todo fun­cio­ne como es debi­do, si ade­más de un ser­vi­cio esta­mos ven­dien­do algo. No bas­ta sólo con sus­ti­tuir­lo por otro nue­vo, a veces esto inclu­so es lo de menos, sino que tene­mos que dejar­lo exac­ta­men­te como lo tenía el clien­te para que él siga tra­ba­jan­do como si nada hubie­ra ocu­rri­do.

En este sen­ti­do, el enfo­que que tie­ne el ser­vi­cio pos­ven­ta en muchas empre­sas resul­ta equi­vo­ca­do. No se tra­ta de ofre­cer algo sim­ple­men­te por­que tam­bién lo hace tu com­pe­ten­cia, sino que tie­ne que ser un arma pode­ro­sa para luchar con­tra gran­des empre­sas que muchas veces ofre­cen lo mis­mo que noso­tros a tra­vés de Inter­net.

El ser­vi­cio pos­ven­ta el clien­te lo tie­ne que per­ci­bir como un valor aña­di­do a nues­tro pro­duc­to, hacer­le enten­der que supo­ne la garan­tía de con­ti­nui­dad de nego­cio que muchas veces nece­si­tan, o la tran­qui­li­dad para el clien­te de que tie­ne a quién lla­mar cuan­do ten­ga un pro­ble­ma. Poner una cara a este ser­vi­cio es muy impor­tan­te para que fun­cio­na correc­ta­men­te.

Al final se tra­ta de inver­tir en este ser­vi­cio en igual medi­da que lo haría­mos con el depar­ta­men­to comer­cial para lograr el equi­li­brio nece­sa­rio, rete­ner a nues­tros clien­tes, no como pri­sio­ne­ros por­que no tie­nen otra solu­ción, sino más bien por­que están satis­fe­chos con nues­tros ser­vi­cios y pro­duc­tos.