Conscientes del miedo que se apodera de tantas personas cuando llega el momento de cumplir con sus obligaciones anuales con el fisco, Wieden + Kennedy Portland ha decidido echar mano de esta pavorosa premisa en una campaña para la empresa especializada en software de impuestos TurboTax.
El eje central de esta campaña es un spot de 60 segundos de duración que es a la vez aterrador, extravagante y tierno a partes iguales.
Siguiendo los patrones de las películas de terror, el anuncio se abre con la escena de una mujer encerrada en un armario y completamente aterrada por la proximidad de una misteriosa sombra que no le resulta en absoluto familiar. Cuando la puerta del armario por fin se abre, la protagonista se topa de bruces con un gracioso osito que mueve graciosamente sus caderas al ritmo de los divertidos ruiditos que emite con la boca.
“There’s Nothing To Be Afraid of” (No hay que temer) es el eslogan del delirante spot de TurboBox, con el que la firma pretende convencer al espectador de que la declaración de impuestos no es en absoluto espeluznante para el contribuyente, si cuenta con la ayuda del práctico software de la compañía.
Junto con este spot TurboTax ha lanzado también otros tres anuncios con una tónica semejante. Y no es la primera vez que la empresa lanza spots asociados a las películas de terror en su publicidad. En 2017, y con ocasión la Super Bowl, la compañía se sacó de la chistera un horripilante anuncio protagonizado por la actriz Kathy Bates.
Además de la agencia Wieden + Kennedy Portland, en la nueva campaña de TurboTax han estado involucrados también la productora Reset, la empresa de postproducción Cartel y el director Gary Freedman.
