La realidad de los mayores de 65 años en cuanto a medios de comunicación y espacios públicos, es que apenas cuentan con una poca visibilidad en ellos, rondando, según un estudio realizado por Kantar, un 4,3% de presencia en los anuncios de televisión, porcentaje que no es mejor en otros medios como revistas, cine o música.
Teniendo en cuenta esta situación, La Despensa ha querido reivindicar la injusta invisibilidad de estas generaciones. Para ello, ha aprovechado el sismo mediático que ha generado la aplicación FaceApp y ha intervenido y editado el contenido de todo tipo de soportes publicitarios y de medios de comunicación. Ha ido por todo: anuncios, portadas, carteles, banners y gráficas de todo tipo. Como resultado, por ejemplo, han presentado a un irreconocible Pablo 
Alborán, ya entrado en años, sacado de su campaña de Samsung.
Esta campaña de concienciación ha sacado partido del #OldChallenge para, precisamente, dar visibilidad a la población de la tercera edad. Como corolario, La Despensa ha elaborado un resumen de todas sus acciones mediante un vídeo que refleja la ausencia de representación en los medios de las personas por encima de esa franja de edad. A su vez, la 
agencia ha creado gifs en Instagram con las caras más reconocibles de la publicidad actual para invitar a la gente a unir fuerzas y hackear sus propios anuncios.
Mediante esta iniciativa, La Despensa busca que los medios y agentes de comunicación incorporen a estos consumidores olvidados. Además, la compañía profundiza en esta situación en sus informes mensuales The Happy Pantry, donde otorgan a nuestros mayores el sobrenombre de Generación Gold.
