El amor al primer mordisco es la estrella de este spot de KFC

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El amor al primer mordisco es la estrella de este spot de KFC

La anticipación de pegarle el primer mordisco a ese alimento particularmente suculento, es a menudo lo que más disfrutamos. Esa deliciosa anticipación es la que KFC ha elegido como protagonista en un spot lanzado en Reino Unido y rubricado por la agencia Mother Londres.

El anuncio juega con el drama solapado a la experiencia sensorial del primer bocado, concentrándose en el instante de gozo que embarga al comensal cuando el alimento que se come con los ojos se abre paso por fin en su boca.

Con el tema I Got’cha, de Greenflow, como telón de fondo, el spot, de 30 segundos de duración, muestra a clientes de KFC degustando diferentes variedades de pollo frito de la cadena de comida rápida en su casa, en sus automóviles o en los restaurantes de la compañía.

«A través de investigaciones muy extensivas hemos podido concluir que la anticipación por el primer mordisco a nuestro famoso pollo frito es un momento absolutamente culminante en la experiencia de comer en KFC. La gente se toma realmente su tiempo buscando el lugar más crujiente y jugoso para pegar el primer bocado a nuestros productos. Nuestra nueva campaña fija la mirada en la verdad absolutamente inapelable sobre la manera en que la gente saborea nuestra comida«, comenta Leo Sloley, marketing lead de KFC en Reino Unido e Irlanda.

La nueva campaña de KFC incluye también acciones de publicidad exterior y publicidad gráfica que celebran el sabroso amor al primer mordisco que embelesa a los clientes de la cadena de comida rápida.

«Desde el director a los fotógrafos, pasando por la iluminación, la música, el diseño de sonido y los títulos, todas y cada una de las elecciones que hicimos para alumbrar la campaña entroncan de manera directa con la anticipación que todos sentimos por el delicioso y apetitoso primer mordisco de pollo frito«, añade James Ross-Edwards, director creativo de Mother.

El año pasado, McDonald’s lanzaba First Bites, una campaña inspirada en una idea muy parecida a la que vertebra lo último de KFC con la cual la cadena de los arcos amarillos vendía las bondades de la hamburguesa McSpicy Chicken y se centraba en el sabor picante de este producto.