King Digital Entertainment, una de las principales productoras de juegos en el mundo móvil, ha pasado a formar parte del patrimonio de uno de los gigantes del mundo de los videojuegos: Activision, que se ha comprado a los creadores del Candy Crush Saga por nada menos que 5.900 millones de dólares. un terremoto en el mercado del videojuego, móvil y tradicional
Bajo el techo de Activision/Blizzard se cobijan ahora tres grandes sagas que generan cientos de millones al año: Call of Duty, World of Warcraft y Candy Crush.
El negocio terminará de aprobarse en Irlanda, país de residencia de King, y será oficial en primavera de 2016. Aunque King hace más juegos que la famosa saga Candy Crush (hablamos de Papa Pear Saga o Farm Hero Saga), ésta se ha constituido en el mayor exponente en redes de jugadores móviles y en Facebook, y logra más de 474 millones de jugadores activos al mes, según los resultados del último trimestre fiscal de la compañía.
Recordemos otras adquisiciones que han involucrado sumas similares en el mundo del entretenimiento. Disney compró Star Wars por 4.000 millones, Minecraft le costó a Microsoft 2.500 millones, Facebook pagó por Oculus 2.000 millones de dólares, y Twitch le costó a Amazon 970 millones.
Con este millonario negocio, Activision/Blizzard consiguen sentar su presencia en el pujante mercado móvil, lugar donde no terminan de acomodarse (sólo el 5% de sus ingresos llegan desde ahí). Por eso el equipo de King, forjado en el negocio de las microtransacciones, es uno de los activos más valiosos que ha adquirido Activision: Riccardo Zacconi, Sebastian Knutsson y Stephane Kurgan son los actuales directivos de King, y son además unos verdaderos magos al realizar su trabajo.
