Nota de 6,1 en nivel de madurez digital de los directivos

En 2015 las fir­mas EADA Busi­ness School y Roca Sal­va­te­lla se unie­ron para rea­li­zar un infor­me sobre el nivel direc­ti­vo digi­tal. Este año, 2017, han rea­li­za­do un segun­do infor­me cuyo obje­ti­vo es cono­cer cómo ha evo­lu­cio­na­do la madu­rez en el pro­ce­so de trans­for­ma­ción digi­tal.

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Para rea­li­zar este estu­dio, se han encues­ta­do a casi 600 direc­ti­vos per­te­ne­cien­tes a dife­ren­tes sec­to­res y tama­ños de empre­sa. El cues­tio­na­rio, de 37 pre­gun­tas, inda­gó sobre cono­ci­mien­to y apli­ca­ción, inclu­yen­do cin­co cues­tio­nes acer­ca de la estra­te­gia digi­tal y las polí­ti­cas en la orga­ni­za­ción.

El infor­me reve­la que el 37% de los eje­cu­ti­vos con­si­de­ran que la direc­ción gene­ral de las empre­sas es el depar­ta­men­to encar­ga­do de lide­rar la trans­for­ma­ción digi­tal. En el ante­rior estu­dio, el área que lide­ra­ba esto era la de mar­ke­ting (32%).

Ante estos datos, Ramón Cos­ta, pro­fe­sor de la EADA Busi­ness School ha decla­ra­do que “pode­mos cons­ta­tar que la trans­for­ma­ción digi­tal ya for­ma par­te de la agen­da del comi­té de direc­ción de las orga­ni­za­cio­nes. Estos, han inte­rio­ri­za­do el impac­to que tie­ne el uso inten­si­vo de las tec­no­lo­gías en sus pro­ce­sos, nego­cios y rela­cio­nes. No obs­tan­te, esto no impli­ca que los direc­ti­vos estén pre­pa­ra­dos para tras­la­dar estas tec­no­lo­gías digi­ta­les y el cam­bio que supo­nen a la estra­te­gia cor­po­ra­ti­va”.

trEl estu­dio ha ana­li­za­do el nivel de madu­rez digi­tal que tie­nen los direc­ti­vos. De media, este nivel ha obte­ni­do una nota de 6,1 sobre 10. Las habi­li­da­des ope­ra­ti­vas son las que lide­ran este ran­king, con una nota de 7,1. El tra­ba­jo en equi­po tie­ne una pun­tua­ción de 5,5. Por deba­jo del “apro­ba­do” se encuen­tra el tra­ba­jo en el ámbi­to de toda la orga­ni­za­ción (4,9) y en el entorno que ope­ran (4,6).

Tam­bién se ha eva­lua­do el uso de las tec­no­lo­gías. Res­pec­to al ante­rior infor­me se pue­de ver una ten­den­cia al alza en uti­li­zar este méto­do como herra­mien­ta com­pe­ti­ti­va. No obs­tan­te, que­da mucho camino por reco­rrer. Esto se debe a que sola­men­te un 37% de las empre­sas creen que su uso de tec­no­lo­gías es alto o muy alto. El 41% con­si­de­ra que su empleo es medio.

Como con­clu­sio­nes, el estu­dio esti­ma que las empre­sas hacen un buen uso de las tec­no­lo­gías digi­ta­les, ya que esto les per­mi­te tra­ba­jar des­de cual­quier ubi­ca­ción y acce­der a su infor­ma­ción. En cam­bio, se con­si­de­ra que la apli­ca­ción de las tec­no­lo­gías más recien­tes como pue­de ser el block­chain, inter­net of things y la reali­dad vir­tual y aumen­ta­da, no se está rea­li­zan­do de for­ma correc­ta. Ade­más, se ha dado un paso atrás en el uso de dife­ren­tes fuen­tes para man­te­ner­se infor­ma­dos.