La ado­les­cen­cia siem­pre ha sido una épo­ca con­vul­sa y com­pli­ca­da, y con las redes socia­les se ha aña­di­do un nue­vo fren­te de bata­lla, como mues­tra esta nue­va cam­pa­ña de Movis­tar en Argen­ti­na, obra de Wun­der­man Bue­nos Aires. La ori­gi­na­li­dad de esta cam­pa­ña es que se narran dos líneas tem­po­ra­les dife­ren­tes y el espec­ta­dor pue­de ele­gir cuál pre­fie­re ver.

[fancy_images width=“307” height=“131”]
[image]https://prcomunicacion.com/wp-content/uploads/2018/08/mo4.jpg[/image]
[image]https://prcomunicacion.com/wp-content/uploads/2018/08/mo5.jpg[/image]
[image]https://prcomunicacion.com/wp-content/uploads/2018/08/mo3.jpg[/image]
[image]https://prcomunicacion.com/wp-content/uploads/2018/08/mo2.jpg[/image]
[/fancy_images]

Pers­pec­ti­ves sigue el día de un mis­mo chi­co, tan­to en casa como en la escue­la. Los usua­rios pue­den, con tan solo girar su telé­fono móvil, variar entre las dos pers­pec­ti­vas.

En el pri­mer esce­na­rio, el ado­les­cen­te se baja del auto­bús de la escue­la para des­cu­brir un post en las redes socia­les que le insul­ta. Cuan­do, des­tro­za­do, va al baño a vomi­tar, sus mato­nes le están gra­ban­do. En la segun­da pers­pec­ti­va, el mucha­cho lle­ga a su casa. No tie­ne ape­ti­to, se encuen­tra dis­tan­te, en silen­cio, psí­qui­ca­men­te enfer­mo. Has­ta que su her­ma­na peque­ña le encuen­tra llo­ran­do en el lava­bo. Ambas ver­sio­nes aca­ban con el joven des­tro­zan­do su telé­fono móvil y rom­pién­do­se emo­cio­nal­men­te. En la pan­ta­lla rota del dis­po­si­ti­vo, se pue­de ver que un ami­go le pre­gun­ta qué está hacien­do.

La cam­pa­ña quie­re que los adul­tos pue­dan reco­no­cer las seña­les del ciber­aco­so, para poder actuar a tiem­po. El pro­yec­to recuer­da que, cuan­do se tra­ta de bull­ying, no impor­ta la for­ma en la que se pre­sen­te, siem­pre tie­ne unas con­se­cuen­cias devas­ta­do­ras que pue­den ser pre­ve­ni­das inter­ce­dien­do de for­ma correc­ta.

“Movis­tar nos mos­tró su nece­si­dad de abor­dar el con­su­mo res­pon­sa­ble de la tec­no­lo­gía. Así, sur­gió la idea de hablar de la pro­ble­má­ti­ca des­de dos luga­res. Uno, el estra­té­gi­co, mos­tran­do todos los indi­cios de cyber­bull­ying que no vemos, por­que esta­mos mos­tran­do las cosas des­de un solo lado y cam­biar el pun­to de vis­ta nos ayu­da a detec­tar­las. El otro aspec­to es el tec­no­ló­gi­co. Qui­si­mos lle­gar a los más jóve­nes ofre­cién­do­les algo que tam­bién los atra­je­ra des­de la expe­rien­cia mobi­le”, comen­tan los direc­to­res crea­ti­vos eje­cu­ti­vos de Wun­der­man Latam.