Los coches de Google se aventuran por las calles sin conductores humanos al volante

cochLos coches autó­no­mos van camino a ser una reali­dad más pron­to que tar­de. Way­mo, filial de Goo­gle, ha comen­za­do a rea­li­zar prue­bas de vehícu­los en modo 100% autó­no­mo por las calles públi­cas de la ciu­dad esta­dou­ni­den­se de Chand­ler (Ari­zo­na).

Las prue­bas se están desa­rro­llan­do en un área res­trin­gi­da de apro­xi­ma­da­men­te 260 kiló­me­tros cua­dra­dos, pero Way­mo tie­ne ya en men­te expan­dir­la. En el trans­cur­so de los pró­xi­mos meses un gru­po de volun­ta­rios par­ti­ci­pa­rá en prue­bas que echa­rán raí­ces en sus ruti­nas dia­rias (ir al tra­ba­jo o reco­ger a los niños en el cole­gio, por ejem­plo). En estos tests, y por razo­nes de segu­ri­dad, un inge­nie­ro via­ja­rá en la par­te de atrás del vehícu­lo por si su inter­ven­ción se hace nece­sa­ria en caso de emer­gen­cia.

Way­mo es una empre­sa inde­pen­dien­te cobi­ja­da por Goo­gle cuyo últi­mo obje­ti­vo es desa­rro­llar auto­mó­vi­les sin pilo­tos. Debi­do a su carác­ter inde­pen­dien­te, Way­mo dis­fru­ta de un mayor mar­gen de manio­bra a nivel ope­ra­ti­vo y de esta mane­ra está en posi­ción de atraer un mayor volu­men de capi­ta­les.

coch2Los coches autó­no­mos comen­za­ron a desa­rro­llar­se hace ocho años y actual­men­te son varias las empre­sas que com­pi­ten por ser las pri­me­ras en lan­zar su ser­vi­cio al mer­ca­do. Tes­la, Uber y Lyft son algu­nas de las com­pa­ñías que com­pi­ten en este pro­me­te­dor mer­ca­do.

Hace apro­xi­ma­da­men­te dos años Way­mo se adju­di­có un autén­ti­co hito en el mer­ca­do de los auto­mó­vi­les autó­no­mos: Ste­ve Mahan, un hom­bre aque­ja­do de cegue­ra, logró com­ple­tar por pri­me­ra vez un via­je des­de un par­que has­ta el con­sul­to­rio de su doc­tor sin que hubie­ra nadie sen­ta­do al volan­te.

Tras aquel via­je, Way­mo con­ti­nuó desa­rro­llan­do y per­fec­cio­nan­do su sis­te­ma en cola­bo­ra­ción con Fiat Chrys­ler a fin de poder seguir avan­zan­do en su sis­te­ma de coches autó­no­mos.