Como tributo a la edición número 50 del Super Bowl, la agencia Ad Age eligió los spots más memorables de la historia del evento. Si bien se trata de una selección totalmente subjetiva, se ha tenido en cuenta que el impacto de todos ellos persistió mucho después de que sonara el silbato final.
10. Budweiser, Whassup!?
Este tour de force de DDB Worldwide en el año 2000 puede haber frustrado a los gramáticos, pero deleitó al público y se volvió parte del lenguaje, para luego ganar un Grand Prix en Cannes. Bob Garfield, por entonces crítico de Ad Age, dijo que el spot “dio no sólo con la última buzzword de los comerciales de cerveza, no sólo con un chiste interno de la cultura negra, no sólo con una expresión universal de elocuencia de pocas palabras, sino también con la representación más cumplida de las relaciones entre hombres”.
El elocuente Entonces Dios creó al granjero, de Paul Harvey frente al evocativo telón de agricultores estadounidenses trabajando duro. Dos minutos enteros de The Richards Group que salieron al aire en el Super Bowl de 2013.
En este anuncio que se robó al público, un mini Darth Vader “descubre” sus poderes ocultos. Ann-Christine Diaz, de Creativity, escribió sobre el comercial de Deutsch de 2011: “El aviso fue notable, no sólo por ser una pieza perfecta de storytellling sino por la movida arriesgada de marketing detrás de él. Contra la tradición del Super Bowl, Volkswagen había lanzado en internet una versión de 60 segundos antes del debut en el partido de un aviso de 30 segundos. Por supuesto, el que el público recuerda es el más largo, que es mucho mejor”.
Esta mezcla de animación y acción real de Wieden + Kennedy unió al grande del basketball Michael Jordan y Bugs Bunny contra los matones de la cancha. De acuerdo con un artículo de Los Angeles Times de 1992, el año en que el anuncio salió en el Super Bowl, el aviso de Nike costó casi 1 millón de dólares, sin contar el salario de Jordan, que era cuatro veces el valor de un típico comercial televisivo. ¿Por qué pagar tanto por un solo aviso? “Nos da un warm glow”, respondió Scott Bedbury, entonces director de publicidad de Nike.
6. Coca-Cola, Mean Joe Green
Ningún Top 10 está completo sin este comercial clásico de Coca-Cola de 1980, que resuena hasta el día de hoy. La interacción entre el chico y el jugador de los Pittsburgh Steelers, y su línea final son parte de la historia de la publicidad. “Si bien no nos propusimos hacer una declaración social o cultural, ciertamente lo hicimos”, contó al blog corporativo de Coca-Cola, Penny Hawkey, la antigua redactora de McCann-Erickson que creó el guion. “Joe fue quizás el primer hombre negro en aparecer en un comercial de una marca nacional, y eso tuvo un efecto profundo en el momento. Las cartas que recibimos estaban llenas de gratitud y emoción”, explicó. Coca-Cola trató de recrear el spot en 2015, pero nada supera al original.
Humor seco y un mensaje de producto certero se unieron inteligentemente en este spot de Fallon del 2000, que convierte a cowboys rudos en arriadores de gatos que vadean arroyos, trepan árboles y se arriesgan a ser dañados por sus garras. Vale la pena ver a estos hombres “viviendo el sueño” una y otra vez.
¿Qué se puede decir que no haya sido dicho ya? Este anuncio de 1971 de McCann Erickson amalgama una fotografía épica, música y letra pegadizas, y un sabor inconfundiblemente “cocacolesco”. Con razón Don Draper reclamó su autoría.
Simple pero espectacular: los caballos Clydesale rinden tributo a un país destrozado por los ataques del 11 de septiembre de 2001. La marca y la agencia, Hill, Holliday, Connors, Cosmopulos, recibieron críticas por comercializar la tragedia. Pero a los consumidores les encantó el comercial.
2. Monster.com, When I Grow Up
“Quiero trepar pisando cabezas hasta llegar a middle management”: el rosario de amargas aspiraciones de niños en este spot de Mullen de 1999 le llegó a los adultos en trabajos sin futuro y resultó ser el mensaje perfecto para un sitio de avisos laborales. Y funcionó: “Antes del Super Bowl, el tráfico de Monster.com era de 1,5 millones de visitantes únicos por mes”, reportó Ad Age en 2000. “El resto de 1999, promedió los 2,5 millones de visitantes por mes. Y el número de búsquedas de currículum se multiplicó por 300 el día después del Super Bowl”. Pensar que casi no sucede, ya que la marca había elegido otra propuesta.
En 1983, el aviso de TBWA/Chiat/Day Los Angeles de Apple Macintosh prometía llevar las computadoras a todos los ciudadanos y no solamente las grandes empresas y los gobiernos. El spot orwelliano fue dirigido por Ridley Scott, y cautivó a la primera generación masiva de usuarios de ordenadores.