Exper­to en el arte que del «story­te­lling», Dan Levy, actor, escri­tor y pro­duc­tor cana­dien­se, quien obtu­vo en 2020 cua­tro pre­mios Emmy en las cua­tro cate­go­rías prin­ci­pa­les (mejor serie de come­dia, mejor direc­ción, mejor guion y mejor actor secun­da­rio) por la acla­ma­da serie Schitt’s Creek, se subió al esce­na­rio del even­to Con­nec­tions de Sales­for­ce en Chica­go jun­to a Sarah Fran­klin, Pre­si­dent Sales­for­ce & Chief Mar­ke­ting Offi­cer, para disec­cio­nar la rele­van­cia de las his­to­rias en el mar­ke­ting en par­ti­cu­lar y en la vida en gene­ral.

• Las mejo­res his­to­rias nacen de la ver­dad y for­jan pun­tos de cone­xión con las per­so­nas

A jui­cio de Levy, el autén­ti­co meo­llo de las his­to­rias es la ver­dad y la ver­dad habi­ta en las entra­ñas de la huma­ni­dad. «Me encan­ta explo­rar la huma­ni­dad y tejer his­to­rias para crear pun­tos de cone­xión con las per­so­nas. Para mí es esen­cial que la gen­te se sien­ta iden­ti­fi­ca­da con las his­to­rias que cuen­to», ase­ve­ró.

«Cuan­do haces un serie de tele­vi­sión como Schitt’s Creek es impor­tan­te que la his­to­ria que allí se narra conec­te con la gen­te. Mi obje­ti­vo es que la gen­te se sien­ta refle­ja­da en lo que allí ve», des­ta­có Levy.

A la hora de per­ge­ñar his­to­rias, el actor, escri­tor y pro­duc­tor cana­dien­se otor­ga ade­más muchí­si­ma impor­tan­cia a la inclu­sión. «Apos­tar por la inclu­sión en el ‘story­te­lling’ me pare­ce fran­ca­men­te lo más impor­tan­te», indi­có.

«Creo que cuan­to más per­mi­ta­mos que las per­so­nas cuen­ten sus his­to­rias, más podre­mos empa­par­nos de viven­cias y de expe­rien­cias y for­jar even­tual­men­te pun­tos de cone­xión», aña­dió.

Si bien su ver­tien­te pro­fe­sio­nal más cono­ci­da es la de «story­te­ller», en su inter­ven­ción en Con­nec­tions Levy qui­so hablar tam­bién de su face­ta como empre­sa­rio a tra­vés de su pro­pia mar­ca de gafas, DL Eye­wear.

La mar­ca de Levy está muy ape­ga­da a la comu­ni­dad y pro­cu­ra sopor­te a los peque­ños nego­cios, en par­ti­cu­lar a aque­llos peque­ños nego­cios don­de las rien­das las lle­van muje­res, per­so­nas de color o miem­bros de la comu­ni­dad LGBT. «Creo fir­me­men­te en que el éxi­to se que­da en reali­dad en agua de borra­jas si no pue­des com­par­tir­lo con los demás», dijo.

«Mi inten­ción es que la voz de la que bro­tan mis his­to­rias sea lo más sin­gu­lar posi­ble. Espe­ro poder dejar hue­lla en un mun­do no solo más trans­pa­ren­te sino tam­bién más decen­te», enfa­ti­zó.

• La IA no pue­de ni debe escri­bir guio­nes

En su inter­ven­ción, no pudo evi­tar refe­rir­se a la omni­pre­sen­te IA. «No quie­ro que la IA escri­ba series de tele­vi­sión. Sé que es más bara­to y más efi­cien­te, pero se tra­ta de una idea abso­lu­ta­men­te infer­nal para mí. Lo que real­men­te deseo son voces huma­nas, son impres­cin­di­bles para la cone­xión», con­fe­só en un even­to que orbi­ta­ba en bue­na medi­da en torno a las bon­da­des de la IA.

Levy con­ti­nuó su rela­to dedi­can­do pala­bras espe­cial­men­te lau­da­to­rias a la inte­gri­dad, esa que dice que tan defi­ci­ta­ria es en su pro­fe­sión de actor y pro­duc­tor. «Es muy difí­cil reco­brar tu inte­gri­dad una vez la has per­di­do», sub­ra­yó.

El crea­dor de Schitt’s Creek con­clu­yó su inter­ven­ción ani­man­do a los pre­sen­tes a tener ideas y eje­cu­tar­las, aun­que su eje­cu­ción no lle­gue ini­cial­men­te a buen puer­to. «Pue­des escri­bir un guion y que no sal­ga bien a la pri­me­ra y tam­po­co a la segun­da ni a la ter­ce­ra ni a la cuar­ta ni a la quin­ta, pero qui­zás tras la expe­rien­cia pue­das con­ver­tir­te en pro­fe­sor de futu­ros guio­nis­tas, quién sabe», bro­meó.

«Lo impor­tan­te no es tan­to el resul­ta­do como la expe­rien­cia. Intén­ta­lo siem­pre con aque­llo que real­men­te deseas y deja apar­ca­do tu ego. Ya solo la expe­rien­cia mere­ce la pena y es increí­ble­men­te valio­sa», con­clu­yó.