La soledad se va por un tubo en este cálido spot de Volkswagen

La soledad se va por un tubo en este cálido spot de Volkswagen

Dicen a menu­do, espe­cial­men­te quie­nes están muy lejos de la vejez, que la edad no es tan­to un núme­ro como un sen­ti­mien­to. Esta fra­se tan polí­ti­ca­men­te correc­ta se reve­la, sin embar­go, como abso­lu­ta­men­te cier­ta en un sober­bio spot fir­ma­do por un estu­dian­te para Volks­wa­gen.

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El anun­cio, bau­ti­za­do con el nom­bre de Lone­so­me Rider y fir­ma­do por Peer-André Gro­te, exalumno de la Aca­de­mia de Cine de Baden-Würt­tem­berg, se asien­ta sobre un “insight” del que a menu­do no se per­ca­tan los que están toda­vía a muchos años de la senec­tud: que las per­so­nas mayo­res dis­fru­tan muchí­si­mo con­du­cien­do.

Tan­tí­si­mo gozan algu­nos ancia­nos al volan­te que no pare­cen tener ojos para nada ni nadie más. Eso es pre­ci­sa­men­te lo que le suce­de al pro­ta­go­nis­ta mas­cu­lino del spot, que con­de­na a su espo­sa de toda la vida a la sole­dad por cul­pa de la fer­vien­te pasión que le ins­pi­ra su Volks­wa­gen Golf.

La his­to­ria de la pare­ja, abo­ca­da a tran­si­tar los últi­mos años de su vida en soli­ta­rio, no pin­ta dema­sia­do bien. Sin embar­go, al final todo da un feliz giro y des­cu­bri­mos que el anciano no quie­re dejar a su espo­sa al mar­gen de las ale­grías que le pro­cu­ra poner­se tras los man­dos de su Volks­wa­gen Golf.

En idea de Lone­so­me Rider estu­vie­ron invo­lu­cra­dos Mal­te Mosel y el pro­pio Gro­te. Tras la cáma­ra para diri­gir el spot se colo­có Tim Wes­kamp. La edi­ción del anun­cio corrió a car­go de Kira König y el elen­co estu­vo enca­be­za­do por Dag­mar von Kur­min, Klaus Müns­ter e Inge Pre­del.

Si bien se tra­ta de un anun­cio de cor­te espe­cu­la­ti­vo, el tra­ba­jo de Gro­te ha resul­ta­do ser sim­ple­men­te impac­tan­te.