Iberdrola, la principal eléctrica de Europa y España, logró emocionar a millones de hogares con su último anuncio de 2024. Emitido justo antes de las campanadas para terminar el año, el spot fue transmitido en las principales cadenas de televisión (TVE, Atresmedia y Mediaset), alcanzando a más de 11 millones de espectadores, según los datos de las empresas medidoras de audiencia.
Rodado en la localidad asturiana de Luarca, el anuncio cuenta la historia de Roque, un pez linterna que, con la ayuda de una niña de 10 años, aprende a iluminarse. Usando de ejemplo las luces de Navidad, la pequeña enseña a Roque a encender su luz para poder llegar hasta alta mar, donde el padre de la niña, pescador, trabaja en la oscuridad. En una escena conmovedora, miles de peces linterna, liderados por Roque, iluminan el océano nocturno como si reflejaran el cielo estrellado.
Una campaña que brilla por su mensaje emocional
El anuncio fue complementado con una espectacular presentación en la Puerta del Sol de Madrid, donde el pez Roque parecía saltar de una lona publicitaria a una fuente situada en el centro de la plaza, justo antes de iniciar la emisión del spot en televisión. Iberdrola utilizó este recurso visual para reforzar su mensaje de respeto por la naturaleza y la conexión entre las familias, muchas de ellas reunidas en torno a la mesa y otras trabajando durante la festividad.
“La Navidad es un momento para reflexionar sobre la importancia de cuidar nuestro entorno y valorar a quienes hacen posibles nuestros momentos felices”, destacó Iberdrola en un comunicado.
Una estrategia no comercial
A diferencia de muchas campañas navideñas que se centran en competir por la atención del mercado, Iberdrola optó por un enfoque más emocional. Según la compañía, el objetivo era “dejar fuera el propósito comercial” y centrar su mensaje en valores como el respeto por el medio ambiente y el cariño hacia las familias.
Esta propuesta en el cierre del año no solo reafirma el compromiso de Iberdrola con la sostenibilidad y la innovación, sino que también consolida su liderazgo en la comunicación publicitaria. Con cerca de 11 millones de clientes, la empresa ha demostrado una vez más su capacidad para conectar con las emociones y transmitir mensajes que trascienden lo meramente comercial.
La historia de Roque consiguió iluminar la noche de millones de españoles, y también dejó una huella en el corazón de quienes compartieron este emotivo momento. Una despedida de año en la que la luz, la naturaleza y la familia fueron los verdaderos protagonistas.