Ryan McGinley, el fotógrafo que se hizo famoso retratando las bacanales protagonizadas por sus propios amigos, todos residentes en Nueva York, ha sido considerado por Tinder como el más indicado para capturar el desenfrenado espíritu de la soltería en la que se jacta de ser la primera gran campaña publicitaria de la célebre aplicación de citas.
Bajo el lema “Single, Not Sorry”, la campaña de Tinder contempla las necesidades de jóvenes dando rienda suelta a su soltería con un descaro totalmente libre de remordimiento y pleno de ingeniosos textos.
“Single is a terrible thing to waste” (Estar soltero es algo terrible de malgastar) se lee en uno de los anuncios que integran la campaña, donde tres jóvenes miran radiantes de felicidad a la cámara mientras patinan cogidas de la mano.
En otro de los anuncios, que lleva por claim “Single does what single wants” (Un soltero hace lo que quiere), aparecen un chico y una chica colándose por una valla de rejilla que lleva el cartel de que está prohibido traspasar.
La campaña incluye los clásicos anuncios impresos, cinemagraphs y vallas digitales que describen escenarios muy similares destacando las bondades de la soltería, además de una fuerte difusión en las redes sociales a través del hashtag #swipelife. Detrás de la campaña está la agencia Wieden + Kennedy Nueva York.
“La soltería no es el purgatorio al que algunos se creen condenados hasta emparejarse. Es una etapa muy importante y como tal debería ser celebrada. Ojalá alguien me hubiera dicho esto cuando era joven y soltera”, manifiesta Laddie Peterson, directora creativa de Wieden + Kennedy Nueva York.