¿Es la distribución digital el futuro de la emisión de deportes?

¿Es la distribución digital el futuro de la emisión de deportes?

dimensionda2Para los espec­ta­do­res del depor­te en direc­to, la tele­vi­sión es una segun­da o inclu­so ter­ce­ra pan­ta­lla, sobre todo para los millen­nials.

En su Infor­me Anual sobre Cober­tu­ra Mediá­ti­ca del Depor­te 2015, el gru­po de inves­ti­ga­ción Niel­sen afir­ma que los depor­tes en direc­to supo­nen en la actua­li­dad más del 93% de todas las emi­sio­nes de TV en direc­to en los EE.UU.

Es jus­to afir­mar que el depor­te en direc­to es, pro­ba­ble­men­te, la últi­ma para­da antes de que el cable se cor­te defi­ni­ti­va­men­te, y con­su­ma­mos todos los medios de for­ma onli­ne. Lo cual pue­de supo­ner un pro­ble­ma para los orga­nis­mos depor­ti­vos que con­fían en los ingre­sos de la cober­tu­ra tele­vi­si­va en direc­to para seguir aumen­tan­do su audien­cia.

dimensiondaCon una nue­va gene­ra­ción de espec­ta­do­res para los que la TV es una segun­da, o inclu­so ter­ce­ra pan­ta­lla, una gene­ra­ción de los lla­ma­dos ‘millen­nials’ ame­na­za con cam­biar para siem­pre la for­ma en que nos conec­ta­mos con nues­tro mun­do”, afir­ma Adam Fos­ter, Group Execu­ti­ve-Sports Prac­ti­ce en . De acuer­do con Niel­sen, el con­su­mo de vídeo en smatpho­ne ha aumen­ta­do más de un 50% en la pobla­ción de entre 18 y 34 años entre 2014 y 2015. De hecho, la pro­por­ción de espec­ta­do­res de vídeos en móvil ha aumen­ta­do más de un 2.000% en cin­co años, y un 170% en los últi­mos dos años.

Tenien­do en cuen­ta que el vídeo repre­sen­ta más de la mitad del ‘eco­sis­te­ma’ del depor­te digi­tal (que inclu­ye sitios web, imá­ge­nes fijas y otros men­sa­jes digi­ta­les), se empie­za a enten­der lo per­ju­di­cial que ha sido – y segui­rá sien­do – la explo­sión de los medios digi­ta­les sobre la emi­sión tra­di­cio­nal en tele­vi­sión.

El cam­bio no ha pasa­do des­aper­ci­bi­do”, expli­ca Fos­ter. Los prin­ci­pa­les orga­ni­za­do­res de even­tos depor­ti­vos han tra­ba­ja­do duro en sus estra­te­gias digi­ta­les duran­te años, y pese a que algu­nos están más avan­za­dos en el camino que otros, no pasa­rá mucho tiem­po antes de que la dis­tri­bu­ción digi­tal se con­vier­ta en la prin­ci­pal fuen­te de ingre­sos de la mayo­ría de las dis­ci­pli­nas depor­ti­vas. “Como par­te del equi­po de Dimen­sion Data que ofre­ció la estra­te­gia de medios digi­ta­les para el Tour de Fran­cia por pri­me­ra vez el año pasa­do, soy muy cons­cien­te de los desa­fíos y opor­tu­ni­da­des de este cam­bio”.

A dife­ren­cia de los depor­tes dispu­tados en esta­dios, como el fút­bol o el rugby, el ciclis­mo se basa en un mode­lo com­ple­ta­men­te dife­ren­te para obte­ner ingre­sos, con la cober­tu­ra tele­vi­si­va como núcleo. Mien­tras que los bene­fi­cios de los depor­tes dispu­tados en esta­dios están liga­dos a los ingre­sos pro­ce­den­tes de los dere­chos de tele­vi­sión, la ven­ta de entra­das y los patro­ci­nios, el ciclis­mo en gene­ral no cobra a los espec­ta­do­res de sus even­tos.

Con una audien­cia tele­vi­si­va en deca­den­cia, encon­trar mejo­res for­mas de apro­ve­char una nue­va gene­ra­ción de espec­ta­do­res a tra­vés de los medios digi­ta­les es fun­da­men­tal para el desa­rro­llo del nego­cio y el futu­ro éxi­to del depor­te, no sólo del ciclis­mo. Otras dis­ci­pli­nas depor­ti­vas que no pue­den com­pe­tir eco­nó­mi­ca­men­te con los depor­tes que lide­ran los dere­chos de tele­vi­sión en pri­me time tam­bién se encon­tra­rán pre­sio­na­das cada vez más hacia medios down the line cuan­do se tra­te de la cober­tu­ra, y más con­cre­ta­men­te la cober­tu­ra tele­vi­si­va en par­ti­cu­lar.

dimensionda3Fos­ter con­fir­ma que es aquí don­de la estra­te­gia digi­tal entra en jue­go. “A medi­da que aumen­ta la can­ti­dad de espec­ta­do­res que pre­fie­ren las peque­ñas pan­ta­llas de los smartpho­nes y las tablets, ya sea para seguir even­tos depor­ti­vos en direc­to o, cada vez más, para seguir a sus depor­tis­tas favo­ri­tos, las opor­tu­ni­da­des abun­dan para recu­pe­rar una par­te de la audien­cia de tele­vi­sión en direc­to”.

Una estra­te­gia digi­tal exi­to­sa ayu­da a las orga­ni­za­cio­nes a atraer a una nue­va gene­ra­ción de espec­ta­do­res a la vez que con­ser­van su públi­co tra­di­cio­nal. De este modo se suben a la ola de los medios socia­les como Twit­ter, Ins­ta­gram y Face­book, sin­cro­ni­zan­do estos cana­les dife­ren­tes entre sí y ofre­cién­do­le la infor­ma­ción al espec­ta­dor en un for­ma­to de fácil acce­so y con­su­mo.

Se pre­ten­de no sólo atraer, sino tam­bién fide­li­zar al espec­ta­dor median­te la crea­ción de víncu­los a otros aspec­tos del esti­lo de vida digi­tal, tales como pro­mo­cio­nes exclu­si­vas de los patro­ci­na­do­res del even­to, o dar­les acce­so anti­ci­pa­do a las últi­mas noti­cias sobre sus equi­pos y depor­tis­tas.

Fos­ter cree que a medi­da que aumen­te la audien­cia digi­tal y los titu­la­res de dere­chos peleen para hacer cre­cer su pro­pia cuo­ta de mer­ca­do, la com­pe­ten­cia por los espec­ta­do­res será más feroz que nun­ca. Esto ya pue­de ver­se en las gran­des sumas de dine­ro inver­ti­do por las com­pa­ñías de tele­vi­sión en los depor­tes más popu­la­res del mun­do deman­dan­do la exclu­si­vi­dad de los dere­chos de emi­sión y así evi­tar la ame­na­za digi­tal.

Por el momen­to, la dis­tri­bu­ción digi­tal segui­rá sien­do un com­ple­men­to ‑en lugar de una alter­na­ti­va- para el depor­te en direc­to, pero me pre­gun­to por cuán­to tiem­po este mode­lo se man­ten­drá antes de que el medio digi­tal se pon­ga a la cabe­za, y el públi­co le siga”, aña­de.