El tiempo y atención mostrado en las redes sociales permite mejorar la marca personal

El tiempo y atención mostrado en las redes sociales permite mejorar la marca personal

tiempo2Los gran­des even­tos inter­na­cio­na­les como los Jue­gos Olím­pi­cos, el Super Bowl o, por qué no, la con­tro­ver­sial visi­ta de Donald Trump a Méxi­co, son even­tos gene­ra­do­res de visi­bi­li­dad natu­ral y es por eso que muchas mar­cas o inclu­so per­so­nas que están tra­ba­jan­do su bran­ding per­so­nal, han que­ri­do ser par­tí­ci­pes invir­tien­do dine­ro para apro­ve­char esa visi­bi­li­dad. Tal vez sería intere­san­te saber que es posi­ble que uno mis­mo pue­da apro­ve­char su mar­ca sin nece­si­dad de inver­tir. 

En la era digi­tal la comu­ni­ca­ción es más rápi­da que nun­ca y los momen­tos impor­tan. El mar­ke­ting en tiem­po real per­mi­te conec­tar­nos a tra­vés de esos momen­tos hacien­do que las emo­cio­nes sean más inten­sas. Toma­mos un suce­so y gene­ra­mos un men­sa­je a par­tir de este, capi­ta­li­za­mos o apro­ve­cha­mos una ten­den­cia exis­ten­te o una noti­cia de actua­li­dad para obte­ner noto­rie­dad. Como canal pre­fe­ren­te para este tipo de mar­ke­ting está Twit­ter, por su uso en tiem­po real.

A con­ti­nua­ción se mues­tran 5 fac­to­res nece­sa­rios a apli­car para tener éxi­to en mar­ke­ting en tiem­po real, sin inver­sión de dine­ro. Por otro lado, sí que es nece­sa­rio inver­tir tiem­po y aten­ción en las redes socia­les.

  1. Iden­ti­fi­car el suce­so. Moni­to­rear las redes socia­les para la iden­ti­fi­ca­ción de una noti­cia rele­van­te. Este suce­so debe ser actual y nove­do­so, debe gene­rar inte­rés o sor­pre­sa por ser inusual, entre­te­ni­do o emo­ti­vo. Si no tie­nes las herra­mien­tas de moni­to­reo pro­fe­sio­na­les pue­des apo­yar­te en una red de influen­cers del sec­tor esco­gi­do pues­to que segu­ra­men­te esta­rán al día, minu­to a minu­to hablan­do de lo que suce­de.
  2. Eje­cu­tar la acción en el clí­max, apro­ve­char el “momen­tum”. La base de éxi­to del mar­ke­ting en tiem­po real es la velo­ci­dad a la que se eje­cu­ta la acción basa­da en el suce­so. Ya sea una acción pro­gra­ma­da o espon­tá­nea, es vital que el lan­za­mien­to se haga jus­to cuan­do el suce­so esta des­per­tan­do inte­rés masi­vo en tu zona geo­grá­fi­ca digi­tal.
  3. tiempo3Espon­ta­nei­dad pero con res­pe­to. Ser muy ági­les sin caer en la impro­vi­sa­ción. Antes de lan­zar esta cam­pa­ña de mar­ke­ting tene­mos que eva­luar el impac­to que ten­drá sobre nues­tra audien­cia. Nun­ca se debe tomar un hecho sen­si­ble y resal­tar­lo a mane­ra de bur­la. Lo que sí se pue­de hacer es resal­tar un hecho trá­gi­co con total res­pe­to y hacer­se pre­sen­tes apo­yán­do­lo.
  4. Dise­ñar el tweet de impac­to, aun­que no sea el per­fec­to. Como comen­ta­mos, el “momen­tum” es deci­si­vo, muchas veces no se tie­ne tiem­po para pen­sar mucho en la idea o para hacer correc­ción de esti­lo o inclu­so de gra­má­ti­ca. Hay que bus­car ser ági­les y algo fle­xi­bles. Algu­nos erro­res pue­den acla­rar­se pos­te­rior­men­te.
  5. Ali­near­se con los están­da­res de comu­ni­ca­ción de la mar­ca. Todas las mar­cas comer­cia­les e inclu­so las per­so­na­les deben tener defi­ni­dos cuá­les son sus reglas de comu­ni­ca­ción digi­tal. Al eje­cu­tar una acción de mar­ke­ting en tiem­po real lo que menos tene­mos es tiem­po, así que de ante­mano debe­mos cono­cer estos tér­mi­nos para no come­ter erro­res imper­do­na­bles en las publi­ca­cio­nes.

La par­te prác­ti­ca. A modo de ejem­plo

El hecho de tomar ese ‘momen­tum’ y publi­car algún comen­ta­rio sobre un acon­te­ci­mien­to con­cre­to per­mi­te gene­rar enga­ge­ment. De esta for­ma al apro­ve­char el ins­tan­te, es posi­ble refor­zar la mar­ca per­so­nal como estra­te­ga digi­tal en ámbi­tos con­cre­tos. Otro ejem­plo es apro­ve­char el momen­to de un hash­tag impor­tan­te y de mucha visi­bi­li­dad.

Si se arma bien una estra­te­gia de mar­ke­ting en tiem­po real, se pue­de con­se­guir rápi­da­men­te atraer a nue­vos segui­do­res y aumen­tar el reco­no­ci­mien­to de la mar­ca. Se pue­de crear enga­ge­ment y awa­re­ness invir­tien­do sólo en tiem­po y aten­ción.