La temperatura nuevamente ha afectado las ventas del sector textil. Después del poco movimiento registrado en el otoño debido a una subida del termómetro fuera de lo habitual, la ola de frío que ha asolado el mes de marzo ha hecho que la industria apenas obtenga beneficios.
En concreto, el barómetro de Acotex (Asociación del Comercio Textil) ha precisado que las ventas en marzo han descendido un 13,4% interanual. En el acumulado de los primeros meses del 2018 las ventas han bajado un 5,7%, con una caída del 3,7% en enero y del 1,9% en febrero.
Eduardo Zamácola, presidente de Acotex, considera que este cambio de las condiciones climatológicas, unidas a la mayor fuerza que están adquiriendo los grandes del e‑commerce en el sector, están haciendo que los consumidores adquieran menos prendas de la temporada primera-verano. Esta colección supone el grueso de la oferta de las tiendas físicas desde principios de año.
Por ello, Zamácola opina que es necesario que el sector textil adopte un nuevo modelo y reformule sus estrategias de venta, ya que, en sus propias palabras, los consumidores no están “reaccionando a lo que el sector les ofrece”.
En este sentido, propone que el sector varíe las fechas con las que trabajan. Por ejemplol, sería más adecuado que las rebajas de invierno duraran hasta marzo. Igualmente, cree necesario que la colección primavera-verano se lance en el mes de mayo cuando empieza a hacer calor, replicando la estrategia para la colección otoño invierno. En su opinión, las prendas de esa temporada deberían dejar de venderse en el mes de agosto puesto que las altas temperaturas que se experimentan ese mes no hacen que los consumidores compren ropa de abrigo.
No obstante, el presidente de Acotex prevé que el sector de la moda presentará mejores resultados en abril. Esto se debe a que el cuarto mes del año contará con más días de venta que el año pasado.
