El interés por la sostenibilidad aumenta en redes sociales un 32% en un solo año

En un pano­ra­ma mar­ca­do por los retos del cam­bio cli­má­ti­co y los desa­fíos eco­nó­mi­cos, la preo­cu­pa­ción por el bien­es­tar del pla­ne­ta tie­rra y la socie­dad ha toma­do un rol pro­ta­go­nis­ta, tan­to para las per­so­nas como para las mar­cas y orga­ni­za­cio­nes.

Por ello, los espe­cia­lis­tas en mar­ke­ting se enfren­tan al desa­fío de inte­grar este tipo de prác­ti­cas y valo­res en sus estra­te­gias para conec­tar con con­su­mi­do­res cada vez más com­pro­me­ti­dos con el medio ambien­te, ase­gu­ran des­de MCI Spain & Por­tu­gal, agen­cia glo­bal de Enga­ge­ment Mar­ke­ting.

Así, en el estu­dio The Savvy Con­su­mer: A New Mind­set (El con­su­mi­dor inte­li­gen­te: una nue­va men­ta­li­dad), ela­bo­ra­do por Samy Allian­ce, se reve­la que la sos­te­ni­bi­li­dad sigue sien­do fun­da­men­tal para los con­su­mi­do­res, y espe­cial­men­te para los más jóve­nes, que son los más pre­sen­tes en estas pla­ta­for­mas. En redes socia­les la con­ver­sa­ción sobre este aspec­to ha aumen­ta­do un 32%, refle­jan­do una cre­cien­te preo­cu­pa­ción.

Los con­su­mi­do­res, espe­cial­men­te Millen­nials y la Gene­ra­ción Z, prio­ri­zan mar­cas que ofre­cen pro­gra­mas de fide­li­za­ción y mues­tran un com­pro­mi­so genuino con las cau­sas que defien­den. El pre­cio y los des­cuen­tos siguen sien­do impor­tan­tes, pero aho­ra lo más lla­ma­ti­vo es que se eva­lúa tam­bién el impac­to medioam­bien­tal de los pro­duc­tos, moti­vo por el cual las mar­cas deben tomar medi­das reales, evi­tan­do caer en el Green­wa­shing”, argu­men­ta Rudolf Ran­neg­ger, direc­tor gene­ral adjun­to de MCI Spain & Por­tu­gal.

  • Sos­te­ni­bi­liad y mar­ke­ting, dos fie­les com­pa­ñe­ros

La sos­te­ni­bi­li­dad no es solo una moda; es una nece­si­dad”, afir­man des­de MCI. Para los espe­cia­lis­tas en mar­ke­ting repre­sen­ta una opor­tu­ni­dad úni­ca para conec­tar con con­su­mi­do­res que bus­can más que un pro­duc­to. La sos­te­ni­bi­li­dad se ha con­ver­ti­do en un cri­te­rio de elec­ción para los con­su­mi­do­res, y por ello, las mar­cas que adop­tan prác­ti­cas sos­te­ni­bles se des­ta­can en un mer­ca­do satu­ra­do.

En este sen­ti­do, las com­pa­ñías deben tener cla­ro que una bue­na estra­te­gia de mar­ke­ting ya no se tra­ta tan solo, ni tie­ne como obje­ti­vo prin­ci­pal aumen­tar los bene­fi­cios o fide­li­zar a los clien­tes, sino que para con­se­guir este fin tie­ne que mos­trar a los ciu­da­da­nos que deben estar de su lado, median­te accio­nes con­cre­tas que ayu­den a cons­truir un mun­do mejor.

La sos­te­ni­bi­li­dad no solo conec­ta con los con­su­mi­do­res, sino que tam­bién ofre­ce a las mar­cas la posi­bi­li­dad de dife­ren­ciar­se de la com­pe­ten­cia en un mer­ca­do tan satu­ra­do como el actual”, des­ta­can los exper­tos de este aná­li­sis, quie­nes sos­tie­nen que el apos­tar por el impac­to posi­ti­vo pue­de tra­du­cir­se no solo en una mayor cone­xión con los clien­tes, sino en un aumen­to de bene­fi­cios impul­sa­da por unas cotas de fide­li­za­ción más ele­va­das.

Aho­ra bien, a la hora de incor­po­rar valo­res como la sos­te­ni­bi­li­dad en las estra­te­gias de mar­ke­ting de una empre­sa, exis­ten dife­ren­tes for­mas de hacer­lo. En pri­me­ra ins­tan­cia, se pue­de poner el foco en el pro­duc­to o ser­vi­cio ofre­ci­do, des­ta­can­do el uso de mate­ria­les sos­te­ni­bles o prác­ti­cas labo­ra­les jus­tas para conec­tar con con­su­mi­do­res cons­cien­tes.

Del mis­mo modo, encon­tra­mos tam­bién otras vías, como la intro­duc­ción de cam­bios en las ope­ra­cio­nes de la empre­sa, mos­tran­do esfuer­zos por redu­cir los des­per­di­cios o apos­tan­do por la ener­gía reno­va­ble, o la ‘apro­pia­ción’ del tér­mino sos­te­ni­bi­li­dad como par­te del ADN de la mar­ca, hacien­do de ella una par­te cen­tral de todos los men­sa­jes gene­ra­dos y crean­do, en el pro­ce­so, una iden­ti­dad de mar­ca fuer­te”, deta­lla Ran­neg­ger,

Y con­clu­ye que “a la hora de pre­pa­rar even­tos, inclu­so en el off-line mar­ke­ting, la sos­te­ni­bi­li­dad es cada vez más impor­tan­te, pues las nue­vas gene­ra­cio­nes son más cons­cien­tes y están más preo­cu­pa­das por el medioam­bien­te, como pue­de ser la hue­lla de car­bono gene­ra­da u otros fac­to­res”.