El desafío de cómo construir una marca basada en principios éticos es el tema del Reporte Cannes-Accenture

Una de las con­clu­sio­nes más lla­ma­ti­vas que pre­sen­tó el repor­te Brand Impact, ela­bo­ra­do para el fes­ti­val de Can­nes por Accen­tu­re, se refie­re a las mar­cas impul­sa­das por pro­pó­si­to. “Defi­nir el pro­pó­si­to de la mar­ca pue­de tener un mayor impac­to en el ROI, la efec­ti­vi­dad y su orga­ni­za­ción en gene­ral”, des­ta­ca el estu­dio. Las mar­cas con pro­pó­si­to han cre­ci­do dos veces más rápi­do que otras en los últi­mos 12 años, afir­ma el repor­te.

Otros datos a reco­ger del repor­te son que 91% de los millen­nials cam­bian de mar­ca por cues­tio­nes socia­les, mien­tras que 64% de los con­su­mi­do­res glo­ba­les eli­gen una mar­ca basa­da en la acción social, y 6 de cada 10 no con­fían en una mar­ca has­ta que vean una prue­ba de sus pro­me­sas, dice Accen­tu­re.

El desa­fío es cómo cons­truir una mar­ca basa­da en prin­ci­pios éti­cos y cen­tra­da en la impor­tan­cia del pro­pó­si­to para su audien­cia, tenien­do en cuen­ta los resul­ta­dos fina­les. Este fue el tema cen­tral para la dis­cu­sión en el BIG Deba­te orga­ni­za­do por The Eco­no­mist en Can­nes. ¿El asun­to de los nego­cios es crear valor para los accio­nis­tas o valor para el mun­do?

Arma­dos con el pro­pó­si­to de la mar­ca, los líde­res crea­ti­vos están defen­dien­do a los accio­nis­tas; decir lo que es correc­to para la mar­ca es correc­to para el nego­cio. Sin embar­go, no todas las mar­cas están hacien­do lo que dicen. Enton­ces, ¿cómo pue­den hacer eso mejor?

Según el repor­te, la estra­te­gia con­sis­te en crear con­te­ni­do que se implan­te en los recuer­dos de las per­so­nas y los impul­se hacia el impac­to. A menu­do, esto impli­ca la aso­cia­ción correc­ta entre un acti­vis­ta, una orga­ni­za­ción y un gran narra­dor. Un sen­ti­do común de acti­vis­mo es impor­tan­te, no sea que se corra el ries­go de ser vis­to como opor­tu­nis­ta. “El obje­ti­vo debe ser gene­rar una par­ti­ci­pa­ción volun­ta­ria entre los con­su­mi­do­res: vol­ver a cen­trar la aten­ción en las per­so­nas en lugar de en los pro­duc­tos”.