El Bue­nos Aires Herald ter­mi­nó con casi un siglo y medio de his­to­ria en la pren­sa argen­ti­na al publi­car su últi­ma edi­ción dia­ria como efec­to de la gra­ve cri­sis que pade­ce el perio­dis­mo en el país.

“No sin un gran pesar, el Herald encuen­tra un pun­to final en tan­to úni­co dia­rio escri­to en inglés de Amé­ri­ca Lati­na, tras 140 años en la calle”. Con esas pala­bras comien­za la edi­to­rial de la últi­ma edi­ción dia­ria del emble­má­ti­co medio que nació en el siglo 19. Des­de aho­ra, sal­drá como un sema­na­rio que se edi­ta­rá sólo los días vier­nes.

El títu­lo de las pala­bras del edi­tor fue­ron “At the end of the day” (que tra­du­ci­do por la pro­pia edi­ción se lee como “El final de un dia­rio”).

En el tex­to se brin­dan deta­lles sobre por qué la publi­ca­ción será sema­nal y se da un pano­ra­ma sobre la situa­ción eco­nó­mi­ca del medio. Lo dicen así:

“Los dia­rios enfren­tan recor­tes y ope­ra­cio­nes de ciru­gía mayor mien­tras los lec­to­res migran hacia los medios digi­ta­les, lo que deri­va en caí­das en la cir­cu­la­ción y de avi­sos publi­ci­ta­rios. Por otro lado, las audien­cias ‑sobre todo los jóve­nes- que leen y miran las noti­cias a tra­vés de sus smartpho­nes o compu­tado­ras, lo hacen, por lo gene­ral, en for­ma gra­tui­ta”.

Entre las cau­sas, ade­más de “la cri­sis en los medios” como un fenó­meno que des­cri­be como “mun­dial”, la edi­to­rial habla de la situa­ción en Argen­ti­na, “don­de las modi­fi­ca­cio­nes en la for­ma de dis­tri­bu­ción de la pau­ta publi­ci­ta­ria ofi­cial y la rece­sión exa­cer­ban estos cam­bios”.

Al final, les habla a los lec­to­res y los des­cri­be como “fie­les que han acom­pa­ña­do todos los días”. Y a los tra­ba­ja­do­res des­pe­di­dos: “Han escri­to, dia­gra­ma­do y corre­gi­do pági­nas cla­ves de nues­tra his­to­ria”.

La últi­ma por­ta­da como dia­rio del tra­di­cio­nal “Herald”. En cri­sis

La cri­sis en el sec­tor del perio­dis­mo en Argen­ti­na es gra­ve y el cie­rre del Bue­nos Aires Herald como perió­di­co dia­rio es sólo un ítem som­brío más. En for­ma per­ma­nen­te hay pro­tes­tas en las redac­cio­nes por des­pi­dos, recon­ver­sio­nes com­pul­si­vas, ofer­tas de reti­ros volun­ta­rios, qui­ta de fir­mas y muy bajos sala­rios en el con­tex­to gene­ral de la eco­no­mía.

Con este anun­cio se anti­ci­pa­ba que el dia­rio se recon­ver­ti­ría en sema­na­rio que sale sólo los vier­nes.