Para que una microempresa sea más productiva, crezca y pueda convertirse en una empresa de mayor envergadura, manejar bien las finanzas se ha vuelto vital para todo emprendedor.
Al respecto, la economista Miriam Vásquez, gerente general de Aprenda, empresa especialista en la capacitación y desarrollo de los emprendedores, indica: “En el Perú, solo 1 de cada 10 MyPE tiene un nivel alto de educación financiera. A lo largo de nuestros más de 15 años acompañando a los emprendedores, hemos observado que muchos negocios cierran porque no saben cómo manejar su dinero y descuidan su historial crediticio. La buena noticia es que administrar bien las finanzas empresariales, es una habilidad que todos pueden desarrollar con la orientación adecuada”.
Luego de haber administrado programas de desarrollo que han beneficiado a más de 1,2 millones de emprendedores, Aprenda comparte cinco consejos clave para que un negocio ordene sus finanzas y crezca:
- Fija precios que te permitan ganar: Conoce tus costos, hasta los más pequeños, y asegúrate de que tus precios de venta te hagan ganar y ayuden a seguir creciendo. Revisa tus costos y precios de venta todos los meses porque el mercado cambia constantemente. Saber si tu negocio gana o pierde es el punto de partida para hacerlo crecer.
- Digitaliza tus transacciones financieras: Un negocio puede perder el equivalente a 1 día de trabajo al mes haciendo depósitos en el banco y hasta 1 hora al día cuadrando caja y contando dinero en efectivo. Reduce el uso de efectivo y acepta pagos con billeteras digitales y tarjetas.
- Cuida la liquidez del negocio: Define bien cuándo y cómo cobras a tus clientes y pagas a tus proveedores. Ten un fondo de reserva para emergencias y planifica las compras grandes para los períodos de mayores ventas del negocio. Separa entre el 1% y 5% de tus ganancias del mes e inviértelo en activos o estrategias que te ayuden a vender más.
- Usa cuentas bancarias diferenciadas: Abre una cuenta bancaria solo para tu negocio para separar el dinero de tu familia del dinero de tu empresa. Asígnate un sueldo y págatelo a fin de cada mes a tu cuenta personal. Anota cada Sol que sacas del negocio para gastos personales.
- Construye tu historial crediticio y haz que el dinero trabaje para ti: Quizá al principio no los necesites, pero llegará el momento en el que tu negocio deberá recurrir a un crédito. Construye tu historial crediticio pidiendo créditos con montos pequeños y pagándolos puntualmente. Así le demostrarás a los bancos que eres un buen pagador y, cuando lo necesites, verás que tendrás acceso a mayores montos y en mejores condiciones.