Las campañas de publicidad infusionadas con la IA están en la cresta de la ola y, nacidas del abrazo entre la tecnología y la inspiración humana, prometen un sismo en la industria creativa. Una de las marcas que se ha colgado del brazo de la tecnología de moda ha sido Prada Beauty, que con la ayuda de la IA ha explorado hermosos y fantásticos universos visuales para cinco de sus fragancias más icónicas.
En su nueva campaña, donde no están ausentes del todo los humanos de carne y hueso, la firma italiana trabajó en colaboración con el fotógrafo suizo Johann Besse, cuyas instantáneas fueron utilizas por Prada Beauty como fuente de inspiración.
Y el resultado son perfectas imágenes en las que el contenido emanado de los frascos de perfume Paradoxe, Luna Rossa Ocean, Infusion d’Iris, L’Homme y Amber Femme parecen flotar en el aire.
Con su nueva campaña, Prada Beauty crea ilusiones ópticas mediante la metamorfosis de dimensiones espaciales en superficies planas y la intersección de la IA con la fotografía, una inestimable ayuda tecnológica. Asimismo, se abren paso errores generados por la IA que se erigen en variantes alternativas de los principales elementos visuales de las imágenes.
La campaña, que ha escogido como escenario el perfil en Instagram de Prada Beauty y se prolongará hasta finales de mayo, ha sido colmada de lisonjas por los seguidores de la marca en la red social.
No es la primera vez que Prada Beauty se zambulle en las profundidades de la tecnología más puntera para vender las bondades de sus fragancias. En 2021 la firma presentó en sociedad a la influencer virtual Candy como embajadora de la fragancia del mismo nombre. Para crear esta prescriptora de naturaleza virtual Prada Beauty se inspiró en la denominada generación TikTok.
En su última campaña, Prada Beauty ensalza las ventajas de la IA, pero no todas las marcas se aproximan a esta tecnología con el último objetivo de poner en valor sus capacidades creativas. En una campaña estrenada recientemente en Australia y Nueva Zelanda, KitKat se mofa, por ejemplo, de manera absolutamente sangrante de las habilidades de la IA.