Los Adbloc­kers o blo­quea­do­res de anun­cios se han con­ver­ti­do en uno de los mayo­res que­bra­de­ros de cabe­za para anun­cian­tes, edi­to­res y agen­cias que han comen­za­do a sumar fuer­zas para poner freno a esta preo­cu­pan­te ten­den­cia.

Pero, des­de otro pun­to de vis­ta, cada vez son más los que ven en estas herra­mien­tas un alta­voz del har­taz­go de los usua­rios que no encuen­tran otra for­ma de esqui­var la cada vez más abun­dan­te publi­ci­dad con la que son bom­bar­dea­dos.

Hablar de Adbloc­kers es impo­si­ble si no se hace refe­ren­cia a Adblock Plus, uno de los pesos pesa­dos del sec­tor. Repre­sen­tan­tes de la com­pa­ñía seña­lan que se ha deba­ti­do mucho a lo lar­go de los últi­mos meses sobre lo que es o no publi­ci­dad acep­ta­ble: “Des­de que deci­di­mos apos­tar por un camino más neu­tral esco­gien­do no blo­quear toda la publi­ci­dad y apo­yan­do a los edi­to­res para desa­rro­llar anun­cios acep­ta­bles, nues­tra ofi­ci­na se ha vis­to inmer­sa en una aca­lo­ra­da dis­cu­sión”.

Una de las mayo­res crí­ti­cas que ha reci­bi­do Adblock Plus ha sido la for­ma en que están mone­ti­zan­do sus ser­vi­cios y por eso han deci­di­do expli­car­los para que el públi­co entien­da mejor su pos­tu­ra y obje­ti­vos.

“En pri­mer lugar, es muy impor­tan­te com­pren­der que cuan­do se aña­de un site o anun­cian­te a nues­tra lis­ta blan­ca, la publi­ci­dad con la que cuen­tan o quie­ran poner debe cum­plir con nues­tros cri­te­rios sobre lo que con­si­de­ra­mos como publi­ci­dad acep­ta­ble, sin excep­cio­nes”, decla­ran.

Sólo los anun­cian­tes que supe­ran los 10 millo­nes de impre­sio­nes en anun­cios al mes son a los que se les pide patro­ci­nar. En el ejem­plo, pode­mos ver cómo que­dan dos sites siguien­do este cri­te­rio. El “A” per­te­ne­ce a la lis­ta blan­ca sin pagar nada, mien­tras que el “B” (por núme­ro de impre­sio­nes) repor­ta una com­pen­sa­ción:

La segun­da par­te de este pro­ce­so se basa en el cálcu­lo de la tasa que se paga. Para los que no han sido admi­ti­dos en la lis­ta de for­ma gra­tui­ta se esta­ble­ce una cuo­ta de licen­cia rela­ti­va a la capa­ci­dad de ingre­sos. No habla­mos de los ingre­sos publi­ci­ta­rios tota­les, sino más bien en rela­ción al valor que el ser­vi­cio crea.

“Estos ingre­sos nos per­mi­ten con­tra­tar a emplea­dos que hacen el tra­ba­jo duro”, afir­man des­de Adblock Plus, recor­dan­do que su idea­rio sobre publi­ci­dad acep­ta­ble pro­por­cio­na un valor a los edi­to­res que antes no tenían.

“Ade­más, se fomen­tan unos anun­cios mejo­res. Incen­ti­van­do eco­nó­mi­ca­men­te la publi­ci­dad no intru­si­va ayu­da­mos a des­cu­brir unos nue­vos están­da­res. Se tra­ta de todo un expe­ri­men­to de inno­va­ción”.