Por Eva Llor­ca – Noer­gia

Las pala­bras cla­ve siguen sien­do por el momen­to uno de los pila­res del SEO, y no siem­pre bas­ta con loca­li­zar aque­llas que mejor fun­cio­nen, hay que ir un paso más allá y crear­las noso­tros mis­mos.

Cada vez son más los que no se con­for­man con bus­car las mejo­res pala­bras cla­ve dis­po­ni­bles para una web, sino que optan por inven­tar las suyas pro­pias, por­que si una pala­bra sólo exis­te por­que tú la has inven­ta­do, nadie más esta­rá com­pi­tien­do con­ti­go por esa pala­bra cla­ve.

No te equi­vo­ques, no empie­ces a inven­tar pala­bras cla­ve para bom­bar­dear tu web con tér­mi­nos que nadie cono­ce. Bas­ta con que crees una mar­ca, un pro­duc­to, una meto­do­lo­gía, eso sí, que sea de inte­rés para tus clien­tes poten­cia­les. Esta pala­bra cla­ve inven­ta­da debe­rá ser tu pala­bra cla­ve prin­ci­pal, antes que las demás.

Como suce­dió con muchas pala­bras inven­ta­das por las com­pa­ñías de mar­ke­ting a lo lar­go de los años, un ejem­plo de estas pala­bras inven­ta­das es el famo­so Ziri­tio­ne del anun­cio de Volks­wa­gen Polo; si esta pala­bra se vuel­ve popu­lar, serás el úni­co que la ten­ga como pala­bra cla­ve y por tan­to posi­cio­na­rás en la pri­me­ra posi­ción de Goo­gle con una pala­bra cla­ve de alto volu­men.

Pro­duc­tos y mar­cas

No siem­pre se pue­de crear un nue­vo pro­duc­to, pero si una nue­va mar­ca para ese mis­mo pro­duc­to, con un nom­bre más pega­di­zo y fácil de recor­dar. Al igual que suce­de con el caso men­cio­na­do antes del Ziri­tio­ne, pue­des aña­dir algu­na fun­cio­na­li­dad adi­cio­nal a tus pro­duc­tos con un nom­bre úni­co ideal para posi­cio­nar como pala­bra cla­ve prin­ci­pal.

Meto­do­lo­gías

Si domi­nas tan­to un tema o un pro­ce­so que has desa­rro­lla­do tu pro­pio sis­te­ma paso a paso o meto­do­lo­gía, pue­des publi­car este cono­ci­mien­to obte­ni­do en base a la expe­rien­cia, nom­brán­do­lo con la pala­bra cla­ve que nos hemos inven­ta­do para posi­cio­nar. ¿Quién no ha oído hablar de la Die­ta Dukan? Si tu publi­ca­ción sus­ci­ta el sufi­cien­te inte­rés, la pala­bra cla­ve se vol­ve­rá popu­lar y por un buen tiem­po serás el úni­co que la domi­ne.

Inven­tar­se la pala­bra

Reúne al equi­po humano del que tan­to hablas en tu web ante una mesa y que el brains­tor­ming haga el res­to. Gra­cias a una llu­via de ideas pue­des vis­lum­brar la pala­bra cla­ve que jamás se te habría ocu­rri­do. Aun­que creas que no nece­si­tas un brains­tor­ming por­que ya tie­nes deci­di­da la pala­bra, al menos con­súl­ta­la con tu gen­te de con­fian­za para ver qué tal reac­cio­nan.

Y, por últi­mo

Cuan­do una pala­bra cla­ve inven­ta­da se vuel­ve popu­lar, esta de pron­to empe­za­rá a ser usa­da por otros para posi­cio­nar sus webs. Algo pare­ci­do a cuan­do apa­re­ce una moda­li­dad depor­ti­va “nue­va”, en poco tiem­po en todos los gim­na­sios de la ciu­dad te ense­ñan a prac­ti­car­la.

Cuan­do escri­bas sobre una téc­ni­ca de tu crea­ción, como una téc­ni­ca para mejo­rar la pro­duc­ti­vi­dad al rea­li­zar equis tarea, un tru­co para solu­cio­nar un pro­ble­ma común, entre otros, recuer­da que SIEM­PRE debes dar­le un nom­bre (tu pala­bra cla­ve inven­ta­da).

No abu­ses de pala­bras cla­ve inven­ta­das en tu web, no estás escri­bien­do una nove­la de aven­tu­ra fan­tás­ti­ca.

Pro­cu­ra que a pesar de ser inven­ta­da, ten­ga el sufi­cien­te sen­ti­do para que no parez­ca inven­ta­da.

Inda­ga por la web y ase­gú­ra­te de que esa key­word no exis­ta y esté sien­do uti­li­za­da.

Y por supues­to, no des­cui­des el res­to de pala­bras cla­ve de tu web.

Eva Llor­ca