La responsabilidad social es cada vez más importante para el consumidor, al punto de que una de cada tres grandes empresas invierte al menos 200.000 pesos en responsabilidad social.
De acuerdo con el Centro Mexicano para la Filantropía (CEMEFI), la principal característica de una empresa socialmente responsable es la adquisición voluntaria de una serie de compromisos con la sociedad, con la que ganan su confianza.
Existen por lo menos tres tipos de marketing que pueden ayudar a una empresa a ser distinguida por su compromiso social.
- Mercadotecnia orientada al consumidor
Es decir, la empresa debe centrar su organización y actividades desde el punto de vista del consumidor, realmente debe tender la intención de satisfacer sus necesidades, obviamente después de segmentar a sus clientes. Esto brindará a la marca la confianza plena de los consumidores, ya que estarán seguros de lo que encontrarán en ella.
- Marketing de innovación
Esta estrategia busca continuamente mejoras “contantes y sonantes” del producto o servicio que la firma oferta. Se concentrarán tanto en este punto que su principal amenaza será otra compañía que haga las cosas de mejor manera que ella.
- Marketing con misión
Primero se deberá elegir un objetivo en términos sociales más que de productos o servicios, lo que ayudará a que el empleado se sienta mejor con su trabajo, ya que tendrá sentido lo que hace en él. Además, esto traspasará barreras hasta llegar al consumidor, que se asegurará de que la compañía no aparenta una misión, sino que realmente la busca.