En los últimos años, Coca-Cola se ha destacado por mostrar su compromiso con la sostenibilidad a través de diferentes iniciativas. Por ejemplo, hace un año, presentó el primer prototipo de botella apta para uso alimentario fabricadas con material plástico reciclado recuperado de entorno marinos.
Ahora, en el marco de su estrategia global de envases Un Mundo sin Residuos (World Without Waste) y como parte de su apuesta por la eco-innovación en sus envases, la compañía ha presentado la creación de una botella de papel a través de un vídeo en el que muestra el primer prototipo en su centro de I+D de Bruselas.
“Nuestra visión es crear una botella de papel que pueda ser reciclada como cualquier otro tipo de papel y este prototipo representa el primer paso en el camino hacia conseguirlo. Este prototipo de botella nos abre un nuevo mundo de posibilidades en materia de envases y estamos convencidos de que los envases de papel tienen un lugar destacado en el futuro”, señala Stijn Franssen, EMEA R&D Packaging Innovation Manager de Coca-Cola.
La creación de esta botella de papel se puso en marcha en 2019 cuando Coca-Cola se sumó a la comunidad The Paper Bottle Project, Paboco, junto a marcas como Carlsberg, L’Oréal y The Absolut Company Pernod Ricard.
El año pasado, Coca-Cola invirtió 180 millones de euros en proyectos de innovación y ecodiseño dentro de su estrategia de sostenibilidad para Europa Occidental “Avanzamos” y con el objetivo de continuar introduciendo material reciclado e innovando en sus envases.
El prototipo de botella de papel cuenta con un cierre y un fino revestimiento de plástico 100% reciclable. “Nuestra visión es crear una botella íntegramente de papel que pueda ser reciclada junto a cualquier otro papel. El siguiente paso en nuestro camino es encontrar la forma de crear una botella sin el fino revestimiento de plástico”, explica Frassen. Con el objetivo de que la botella de papel se adhiera a los mismos altos estándares de seguridad y calidad para envases alimentarios que están actualmente en vigor, Franssen y su equipo están sometiendo al prototipo de botella a exhaustivas pruebas en el laboratorio.
“Todo esto es parte de un viaje para encontrar las soluciones más sostenibles en materia de envases para personas que disfrutan de nuestras bebidas en una manera que se siente bien para ellas y para nuestro planeta”, finaliza Franssen.
El objetivo de Coca-Cola es recoger y reciclar una botella o lata por cada una que vende para 2030 mientras reduce sustancialmente su uso de materiales con plástico virgen y usando exclusivamente materiales para sus envases que sean 100% reciclables.