Capi­tal Energy, com­pa­ñía ener­gé­ti­ca espa­ño­la naci­da en 2002, ha deci­di­do reno­var su ima­gen de mar­ca para ir al paso del rápi­do cre­ci­mien­to que está vivien­do en los últi­mos años.

El nue­vo logo­ti­po de Capi­tal Energy ha evo­lu­cio­na­do sin dejar de refle­jar la esen­cia y los valo­res de la com­pa­ñía: ser sos­te­ni­ble, inno­va­do­ra y digi­tal, ponien­do la mira­da en el futu­ro y cons­tru­yen­do sobre un posi­cio­na­mien­to aún más sóli­do y una visión cla­ra sobre el papel que van a jugar las reno­va­bles en la tran­si­ción ener­gé­ti­ca eco­ló­gi­ca y jus­ta.

El pro­ce­so de redi­se­ño ha teni­do un obje­ti­vo cla­ro: plas­mar de for­ma efec­ti­va la pro­me­sa de mar­ca de res­pe­tar, cui­dar y pro­te­ger el pla­ne­ta. Con esa idea, el sím­bo­lo figu­ra­ti­vo del pla­ne­ta Tie­rra, pre­sen­te en el ante­rior logo, ha pasa­do a con­ver­tir­se en un úni­co con­jun­to, una repre­sen­ta­ción más abs­trac­ta, abier­ta e inclu­si­va.

El nue­vo logo vie­ne acom­pa­ña­do ade­más de un ejer­ci­cio para mejo­rar la legi­bi­li­dad del nom­bre y favo­re­cer su posi­cio­na­mien­to visual. Un nom­bre, Capi­tal Energy, com­pues­to en dos líneas pero en un solo tono, que ayu­da a trans­mi­tir mayor dina­mis­mo y rit­mo, crean­do una iden­ti­dad que le per­mi­ti­rá seguir cre­cien­do como mar­ca y com­pa­ñía.