Con motivo del primer estudio realizado por Bumble en España: Lo que las mujeres (no) quieren, la app de citas ha celebrado un evento en el espacio Juno House Club en Barcelona, el primer club social solo para mujeres. La mesa redonda estuvo moderada por la periodista Cristina Pampín, acompañada por la actriz española Ana Milán, las influencers Devermut y la especialista en psicología emocional y portavoz del estudio, Raquel Mascaraque.
Durante el evento, las invitadas discutieron sobre los datos más relevantes del estudio llevado a cabo por Bumble, comentando temas como el Romanticismo 2.0, la tendencia de “Hardballing”, las Banderas Verdes y las Banderas Rojas en las relaciones y el sexo.
- Romanticismo 2.0
El estudio de Bumble muestra que nos encontramos ante una sociedad influenciada por el tipo de relaciones que se muestran en las redes sociales y el romanticismo de las películas de Hollywood, lo que ha creado un pensamiento idílico sobre las mismas. Así, para 3 de cada 4 españoles (76%), el romanticismo es una parte crucial de una relación, aunque también es cierto que para la mayoría (66%) los ideales románticos tradicionales están anticuados y necesitan urgentemente una actualización. Esto lo afirman, especialmente, las mujeres y la generación Z, según el informe.
En este sentido, Mascaraque afirmaba que para ella “el romanticismo es la pasión y el deseo de salir de la rutina, es decir, la escucha activa”, mientras Ana Milán recordaba cómo su abuela le decía que “el secreto no está en hacerte la dura o no, sino en saber manejar nuestros tiempos”.
- Hardballing
Se trata de una tendencia creciente en torno a las citas, que consiste en ser muy claro con las potenciales parejas sobre lo que se busca en una relación. En este contexto, la pandemia se ha mostrado como una experiencia muy diferente entre las generaciones de millennials y generación Z.
La tendencia hardballing es muy real para los millennials españoles: casi 3 de cada 4 (79%) millennials dicen tener una idea muy clara de lo que buscan. Sin embargo, más de 1 de cada 4 (28%) de la generación Z está adoptando el enfoque opuesto, centrándose más en la exploración y rechazando un enfoque prescriptivo de las citas.
Sobre este punto, Marta, integrante de Devermut, afirmaba que “en el momento en el que las relaciones duran cada vez menos, nos encontramos ante un ritual de citas en el que presentamos la mejor versión de nosotros mismos y la otra persona debe descubrir cómo somos realmente”. Las invitadas llamaban a esta tendencia “el postureo de las relaciones”.
- Green Flags & Red Flags
Por encima de todo, los hombres y las mujeres solteros valoran los mismos tres rasgos: el sentido del humor (73%), la atracción sexual (63%) y los valores compartidos (60%). Parece que, a pesar de las diferentes expectativas y códigos de comportamiento, tanto los hombres como las mujeres buscan lo mismo.
Pero ¿somos sinceros al respecto sobre lo que somos y queremos? Marta, de Devermut, afirma que “con la edad y la experiencia, vamos aprendiendo a descartar cosas. Tienes más claro cuáles son tus red flags y lo que no buscas en una relación”.
En este sentido, mientras Sara, de Devermut, dejaba claro que para ella su red flag principal es “no fluir con el día a día y tener demasiadas preocupaciones planificando el futuro”, para Ana Milán, una gran green flag es “una buena conversación y que tenga sentido del humor”.
Para concluir, “las reglas de las citas están cambiando día tras día y lo vemos tanto en la forma en que las personas abordan las relaciones, como en la forma de conocerse. Nuestra investigación muestra que hoy en día, casi la mitad de los millennials españoles utilizan aplicaciones de citas como Bumble y buscan romper los estereotipos y moldes existentes a la hora de salir”, explica Alba Durán, responsable de marketing de Bumble en España.