Cos­ta de Mar­fil, en Áfri­ca Occi­den­tal, es un autén­ti­co ver­gel des­de el pun­to de vis­ta de las plan­ta­cio­nes de cacao. Allí obtie­nen su mate­ria pri­ma algu­nas de las empre­sas cho­co­la­te­ras más gran­des del mun­do. Sin embar­go, en esa región per­sis­te tam­bién un mal que debe­ría haber sido extir­pa­do hace ya muchí­si­mo tiem­po: la escla­vi­tud moder­na. Aca­bar con esta lacra es pre­ci­sa­men­te el obje­ti­vo de una nue­va ini­cia­ti­va de la mar­ca de hela­dos Mag­num.

La filial de Uni­le­ver ha inver­ti­do más de 80 millo­nes de euros en el cul­ti­vo sos­te­ni­ble de cacao des­de 2012 y quie­re pro­cu­rar sopor­te a las muje­res pro­duc­to­ras de cacao y brin­dar­les fuen­tes alter­na­ti­vas de ingre­sos. Como par­te del plan Cocoa Stra­tegy 2025, Mag­num se ha com­pro­me­ti­do a donar otros 25 millo­nes de euros a pro­gra­mas da ayu­da, hacien­do espe­cial énfa­sis en las muje­res que cul­ti­van cacao.

El obje­ti­vo de Mag­num es apo­yar ini­cia­ti­vas orien­ta­das a las muje­res, pues­to que inver­tir en ellas es tam­bién una for­ma de inver­tir en sus fami­lias y en las comu­ni­da­des a las que están ads­cri­tas. Con­si­de­ran­do que el cacao se cose­cha solo duran­te seis meses al año debi­do a su esta­cio­na­li­dad, Mag­num ve que es vital ayu­dar a las pro­duc­to­ras de cacao y a sus fami­lias a hallar fuen­tes alter­na­ti­vas de ingre­sos en tem­po­ra­da baja.

Gra­cias a la ini­cia­ti­va Plea­su­re Ima­gi­ned, lan­za­da por Mag­num en 2020, 198 muje­res han reci­bi­do ya ase­so­ra­mien­to y for­ma­ción para esta­ble­cer sus pro­pios nego­cios y gene­rar ingre­sos adi­cio­na­les.

La sub­si­dia­ria de Uni­le­ver quie­re, no obs­tan­te, ir un paso más allá en sus esfuer­zos y ha pre­sen­ta­do en socie­dad una nue­va emba­ja­do­ra vir­tual bau­ti­za­da con el nom­bre de AWA. Este ava­tar ha sido alum­bra­do por Mag­num amal­ga­man­do, median­te la téc­ni­ca del 3D map­ping, los ros­tros de 128 muje­res que han for­ma­do par­te de sus pro­gra­mas de ayu­da.

Todo en AWA, des­de su aspec­to has­ta la for­ma en que se mue­ve, es un refle­jo de las 128 muje­res que hay detrás de esta emba­ja­do­ra vir­tual. Ade­más, AWA es un nom­bre afri­cano deri­va­do de Eva, la pri­me­ra mujer, y es extra­or­di­na­ria­men­te popu­lar en Áfri­ca Occi­den­tal.

La idea de uti­li­zar ava­ta­res digi­ta­les como emba­ja­do­res de mar­ca no es nue­va en modo alguno. El gaming y la indus­tria del porno los lle­va emplean­do des­de hace tiem­po y las fir­mas de moda se han suma­do tam­bién a la fie­bre de los ava­ta­res vir­tua­les en los últi­mos tiem­pos.

• Mag­num quie­re aga­sa­jar con apo­yo eco­nó­mi­co y social a 5.000 muje­res

Como si de una influen­cer de car­ne y hue­so se tra­ta­ra, AWA cuen­ta con su pro­pia cuen­ta en Ins­ta­gram, don­de da cuen­ta de nove­da­des sobre el nue­vo pro­gra­ma de ayu­da de Mag­num, que lle­va tam­bién el nom­bre de AWA.

El obje­ti­vo de este pro­gra­ma de ayu­da es pro­cu­rar sopor­te eco­nó­mi­co y social a 5.000 muje­res pro­duc­to­ras de cacao en el trans­cur­so de los pró­xi­mos tres años. Para lograr este obje­ti­vo, la mar­ca tra­ba­ja­rá codo con codo con orga­ni­za­cio­nes no guber­na­men­ta­les.

Como ejem­plo de lo que pue­de dar de sí su pro­gra­ma de ayu­da, Mag­num cita el caso de la star­tup de la dise­ña­do­ra de moda Rebec­ca Zoro, pro­ve­nien­te de una comu­ni­dad con­sa­gra­da al cul­ti­vo de cacao en Cos­ta de Mar­fil.

Mag­num se ha alia­do con Rebec­ca Zoro para alum­brar una colec­ción cáp­su­la de cin­co pren­das de ropa que se pon­drán a la ven­ta en la web de la mar­ca de hela­dos y cuyos ingre­sos irán a parar ínte­gra­men­te a manos de las comu­ni­da­des de cul­ti­vo de cacao de Áfri­ca Occi­den­tal.