A las 18:30 horas del martes 5 de enero de 2016 comenzó la esperada Cabalgata de los Reyes Magos que recorrió Madrid desde Nuevos Ministerios hasta el Palacio de Cibeles. Durante casi tres horas de desfile las carrozas ocuparon las calles de la capital repartiendo ilusión y alegría entre los más pequeños (y no tan niños) en una de las noches más mágicas del año.
Entre las novedades que la cabalgata trajo para este año están la total ausencia de animales, y tal y como informaron desde ABC, el itinerario de la misma se inspiró en los cinco continentes (una carroza por cada uno de ellos) con el objetivo de recalcar el valor de la multiculturalidad y el interés por conocer el mundo que nos rodea. A todo ello se sumó una visión más laica que otros años, con una comitiva compuesta por 2.000 personas y 33 elementos proyectados por un pelotón de 300 bicicletas y dos triciclos cuya misión fue la de proyectar imágenes sobre los edificios.
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El pasado mes de septiembre conocíamos además la noticia de que la cabalgata de este año, la primera organizada bajo el gobierno de la nueva alcaldesa de la capital, Manuela Carmena, se alejaría de su “connotación comercial y de consumo” como parte de la nueva estrategia cultural del consistorio para toda la legislatura, tal y como informaron desde el diario El Mundo.
Maral Kekejian, directora artística de la cabalgata de este año, explicaba que el objetivo de esta edición se enfocó en “contar la historia de los Reyes Magos desde otro punto de vista”. De acuerdo a los datos aportados por Kekejian, recogidos en ABC, necesitaron cuatro meses para elaborar las carrozas. En cuanto al presupuesto, la cifra sumó los 735.000 euros. De los mismos, 535.000 fueron aportados desde las arcas municipales y el resto salió del bolsillo de los patrocinadores.
